Desde hace algunos años se viene hablando de la copa menstrual, especialmente desde que las chicas con más seguidores en redes sociales hablan de los beneficios de ella. Aunque algunas mujeres la descubrieron hace más de una década, ha sido en los últimos tiempos cuando más mella ha hecho en el mercado de higiene femenina. Y no en vano, ya que los beneficios de este utensilio son numerosos.
Si todavía no te has decidido a probar la copa menstrual, a continuación encontrarás algunas buenas razones para intentarlo. Quizá descubras que no es para ti, porque al igual que ocurre con otras cosas, la copa menstrual no es igual de cómoda o efectiva para todas las mujeres. Sin embargo, nada pierdes por probarla y es posible que encuentres el método con el que desterrar definitivamente los tampones y compresas de toda la vida.
Qué es la copa menstrual
La copa menstrual es un recipiente creado en silicona médica y está diseñada para recoger el flujo de la regla directamente en la vagina. Se introduce fácilmente en el interior de la vagina, en el mismo lugar donde se coloca el tampón. Gracias al material en el que está creada, la copa menstrual se adapta a las paredes vaginales, evitando que el flujo salga independientemente de los movimientos que se realicen.
Este utensilio resulta tan práctico y tan cómodo, que lo puedes utilizar durante un máximo de 12 horas, en función de la cantidad de flujo que expulses con tus menstruaciones. Cuando ya está llena, solo tienes que retirar la copa y eliminar el flujo, lavarla muy bien, esterilizarla y volver a colocarla hasta que toque de nuevo vaciarla. La copa menstrual tiene usos ilimitados, es decir, puedes utilizarla durante muchos años mientras se conserve en perfecto estado.
Con lo que podrás ahorrar una gran cantidad de dinero cada mes, al contrario de lo que ocurre con otros artículos de higiene femenina de alto coste. Además de ser más cómoda, más económica a largo plazo, más ecológica y más respetuosa con tu flora vaginal, puedes utilizar la copa menstrual durante todo el ciclo, incluso por la noche. Algo que en el caso de los tampones está contraindicado.
¿Es para todas las mujeres?
Aunque se trata de un artículo en principio diseñado para todas las mujeres, no todas se sienten cómodas con la copa menstrual. En muchos casos se trata de un problema de una talla incorrecta o por haber elegido una de un material más incómodo. Dado que en el mercado actual existen infinidad de marcas y tipos de copa menstrual, no está de más probar diferentes modelos para poder encontrar el perfecto para cada mujer en cada caso.
Lo importante es que tienes la opción de deshacerte para siempre de los tampones, las compresas y los salva eslips, que tan costosos e incómodos resultan en muchos casos. Podrás evitar manchas de sangre en la ropa, porque es muy difícil tener fugas con la copa menstrual, algo que no ocurre con los otros artículos de higiene femenina. También podrás deshacerte de los olores, de tener que cambiarte cada poco tiempo o de que se note la compresa a través de la ropa.
Además, la copa menstrual está fabricada en materiales delicados, respetuosos con la anatomía femenina, como es la silicona médica o en elastómero termoplástico. Es decir, no contienen agentes químicos, ni producen alergias, ni es posible que alguna bacteria prolifere en el material. Un artículo creado para todas, o casi todas las mujeres, indoloro, fácil de utilizar, de mantener, o de transportar.
Y sobre todo, tendrás la posibilidad de reducir el riesgo de sufrir un grave problema de salud asociado al uso de tampones como es el Síndrome del Shock Tóxico. Ya que, aunque no se elimina por completo, con el uso de la copa menstrual el riesgo de sufrir este problema es inferior comparado con el de los tampones. En cualquier caso, evita tener la copa puesta durante más de 10 o 12 horas.