Las ensaladas son un plato imprescindible en cualquier dieta equilibrada, y la ensalada de espinacas, aguacate y grosellas se destaca por su frescura, sabor y propiedades nutritivas inigualables. En Bezzia nos encantan, y hemos adaptado esta receta para que no solo sea deliciosa, sino también versátil y adecuada para distintas necesidades nutricionales. Este plato combina vegetales frescos, frutas y un aderezo único que eleva la experiencia a otro nivel.
Las ensaladas se convierten en una de las opciones más refrescantes y completas durante todo el año, especialmente en épocas calurosas. Gracias a la combinación de espinacas, aguacate, grosellas y otros ingredientes complementarios como los frutos secos y la miel, esta receta no solo destaca por su sabor, sino también por los beneficios que aporta al organismo. Además, su preparación es sencilla, perfecta tanto para un almuerzo ligero como para acompañar otros platos más consistentes.
Ingredientes para una ensalada irresistible
Absolutamente cada ingrediente en esta ensalada desempeña un papel clave, tanto en sabor como en textura y propiedades nutritivas. Veamos lo que necesitas:
Ingredientes principales:
- 4 puñados de espinacas frescas limpias
- 1 aguacate maduro
- 80 g de grosellas
- 1 puñadito de pasas de Corinto
Para la vinagreta de frutos secos:
- 12 nueces
- 12 avellanas
- 12 almendras
- 75 ml de aceite de oliva virgen extra
- 25 ml de vinagre de módena
- 1 cucharadita de miel
- Pimienta molida al gusto
Los beneficios de esta mezcla única
Incorporar esta ensalada en tu dieta te aporta una serie de beneficios. Las espinacas, por ejemplo, son una rica fuente de hierro y antioxidantes, mientras que el aguacate ofrece grasas saludables ideales para el sistema cardiovascular. Las grosellas, por su parte, son pequeñas pero potentes en vitaminas, especialmente vitamina C, fortaleciendo el sistema inmunológico. Por último, los frutos secos proporcionan una textura crujiente y son ricos en ácidos grasos esenciales y minerales.
Cómo preparar esta ensalada paso a paso
- Prepara la base: Coloca las espinacas frescas y limpias cubriendo el fondo de un plato o fuente amplia.
- Pica el aguacate: Abre el aguacate, extrae el hueso y corta la pulpa en dados del tamaño que prefieras. Desecha la cáscara. Reparte los trozos de forma uniforme sobre las espinacas.
- Añade las frutas: Agrega las grosellas lavadas y las pasas de Corinto encima del aguacate y las espinacas.
Preparación de la vinagreta de frutos secos:
- Tuesta los frutos secos: Usa una sartén sin aceite para tostar las nueces, avellanas y almendras a fuego medio. Esto realza su sabor y les aporta un toque crujiente irresistible.
- Pica los frutos secos si lo prefieres, para que se integren mejor con el resto de los ingredientes.
- En un tarro con tapa, mezcla el aceite de oliva virgen extra, el vinagre de módena y la miel. Añade un toque de pimienta molida al gusto. Incorpora los frutos secos tostados.
- Cierra el tarro y agita vigorosamente hasta que todos los ingredientes se mezclen bien y la vinagreta emulsione.
Consejos para personalizar tu ensalada
- Variedad de frutos secos: Cambia las nueces, avellanas o almendras por pistachos o anacardos si buscas una nueva textura y sabor.
- Frutos adicionales: Incorpora granada, fresas o arándanos como complemento a las grosellas para potenciar los antioxidantes.
- Aceites y vinagres aromáticos: Usa aceites de albahaca o vinagre de manzana para añadir un toque único.
Esta ensalada combina perfectamente frescura y sabor en un solo plato, ofreciendo una experiencia culinaria que tú y tus invitados no olvidaréis. En pocos minutos podrás disfrutar de un plato lleno de color, textura y un perfil nutricional maravilloso.