En Bezzia nos encanta disfrutar de recetas tradicionales con un toque especial y práctico. Una de esas elaboraciones imprescindibles en nuestra mesa durante el fin de semana son las albóndigas en salsa. Esta receta no solo reúne sabores deliciosos, sino que también es una solución práctica para tener lista una comida entre semana, aprovechando el día libre para preparar más cantidad. Hoy te presentamos una receta única de albóndigas en salsa de zanahoria con guisantes, llena de sabor y con una textura especialmente casera.
Además de ser una receta muy sabrosa, estas albóndigas te permitirán incorporar verduras a tu dieta de forma sencilla, especialmente si tienes niños en casa. La salsa de zanahoria no solo es deliciosa, sino que también está cargada de nutrientes. Aunque la elaboración tiene varios pasos, el resultado final merece completamente la pena.
Ingredientes para 4 personas
Los ingredientes están divididos en dos apartados: los necesarios para las albóndigas y los específicos para la salsa:
Para las albóndigas:
- 500 g de carne picada (mezcla de ternera y cerdo).
- 1 huevo.
- Un poco de miga remojada en leche.
- 3 cucharadas de pan rallado.
- 4 dientes de ajo picados.
- Perejil fresco, picado.
- Sal y pimienta negra al gusto.
- Harina (para rebozar).
- Aceite de oliva virgen extra, para freír.
- 200 g de guisantes frescos o congelados.
Para la salsa:
- Aceite de oliva virgen extra.
- 1 cebolla grande, picada finamente.
- 1 pimiento verde, troceado.
- 5 zanahorias, peladas y troceadas.
- 1 cucharadita de pimentón dulce.
- Caldo de verduras o agua.
- Sal y pimienta al gusto.
Preparación paso a paso
La elaboración de esta receta se divide en dos partes principales: la preparación de las albóndigas y la elaboración de la salsa. Sigue los pasos con detalle para obtener un resultado espectacular.
Preparación de las albóndigas
- En un bol grande, mezcla la carne picada con el huevo, la miga de pan (ligeramente escurrida de la leche), el pan rallado, el ajo y el perejil picados. Salpimenta al gusto.
- Amasa bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea. Esto garantizará que las albóndigas no se rompan durante la cocción.
- Forma bolas del tamaño deseado para tus albóndigas. Puedes usar una cuchara para medir las porciones y asegurarte de que todas sean uniformes.
- Pasa las albóndigas por harina, asegurándote de cubrirlas completamente.
- Calienta abundante aceite de oliva en una sartén y fríe las albóndigas a fuego medio hasta que estén doradas por fuera. Una vez listas, colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Preparación de la salsa
- En una cazuela grande, calienta un par de cucharadas de aceite de oliva y sofríe la cebolla durante aproximadamente 6 minutos, hasta que esté transparente.
- Añade el pimiento verde y las zanahorias troceadas. Cocina durante 5 minutos adicionales, removiendo ocasionalmente.
- Agrega una cucharadita de pimentón dulce, mezcla bien y cubre las verduras con caldo de verduras o agua. Cocina a fuego medio durante 20 minutos, o hasta que las zanahorias estén tiernas.
- Con la ayuda de una batidora, tritura la salsa hasta obtener una textura cremosa y uniforme. Salpimenta al gusto y devuelve la salsa a la cazuela.
Montaje final
- Introduce las albóndigas fritas en la salsa caliente y añade los guisantes. Cocina todo junto durante 5 minutos más, para que los sabores se integren perfectamente.
Este plato es ideal para servir acompañado de arroz blanco, puré de patatas o una buena rebanada de pan casero. ¡Anímate a preparar esta receta y disfruta de un plato lleno de sabor y tradición!
