Los quistes sebáceos son una condición cutánea común que puede generar preocupación y malestar a quienes los padecen a pesar de no ser peligrosos para nuestra salud. En este artículo, exploraremos en profundidad qué es un quiste sebáceo, cómo se forma y cuáles son las opciones disponibles para tratar y eliminar este tipo de quistes de forma segura y efectiva.
¿Qué es un quiste sebáceo y por qué se forma?
Como ya hemos anticipado, los quistes sebáceos se forman cuando los conductos de las glándulas sebáceas en la piel se obstruyen, lo que lleva a la acumulación de sebo (grasa) y células de la piel en una pequeña bolsa debajo de la superficie de la piel. No representan un peligro para la salud, sin embargo, pueden volverse dolorosos o infectarse.
¿Cómo se sabe que es un quiste sebáceo? Para identificar un quiste sebáceo, comprobaremos que se trata de una protuberancia redondeada y consistencia blanda bajo la piel que se mueve con la presión de los dedos sin producir dolor. ¿No lo tienes claro? En caso de duda sobre si se trata de un quiste sebáceo u otra afección de la piel, consulta con tu médico para un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.
Cómo tratarlo y eliminarlo de forma segura
Nuestro cuerpo tiende a formar diferentes quistes; por suerte en el caso de los quistes sebáceos resultan inofensivos. Que no sean peligrosos no quiere decir, sin embargo, que no puedan resultar molestos. En algunos casos pueden infectarse, inflamarse o debido a su tamaño o ubicación resultar incómodos.
La infección puede generar un absceso, que se inicia con la formación de una cabeza de color blanquecino o amarillento y que se puede llegar a romper ocasionando la exudación de una sustancia viscosa, blanquecina y maloliente.
En los casos en los que los quistes sebáceos resultan molestos es recomendable acudir a un dermatólogo para evaluar la situación y determinar el tratamiento adecuado. Y es que existen soluciones tanto para tratar como para eliminar un quiste sebáceo. Entre las mas comunes se incluyen:
Calor húmedo
Cuando son pequeños, aplicar calor húmedo sobre estos puede facilitar la ruptura de la piel y por tanto su drenaje, en cuyo caso habrá que se asegurarse de que se extrae todo el líquido, ya que en caso contrario se puede regenerar.
Antibióticos
En caso de infección, se pueden recetar antibióticos tópicos u orales para tratar la infección y prevenir complicaciones. No obstante, si no se produce ninguna mejoría habrá que proceder a romper la piel realizando una pequeña incisión para proceder a su drenaje.
Inyecciones de corticoesteroides
En ocasiones, se puede también utilizar una inyección de corticoesteroides para reducir la inflamación y el tamaño del quiste sebáceo. Mediante esta técnica se busca la atrofia de la cápsula que lo contiene sin cicatrices. No siempre puede sustituir a la cirugía y es esencial evaluar cada caso de forma personal.
Drenaje o extracción quirúrgica
En casos de quistes sebáceos inflamados, infectados o de gran tamaño, el dermatólogo puede optar por realizar una pequeña incisión para drenar el contenido o extraer el quiste en su totalidad. Y es que podría volver a reproducirse si no se extrae la totalidad del líquido queratinoso y el saco que lo contiene.
Seguir las recomendaciones de un profesional de la salud para tratar y eliminar un quiste sebáceo es esencial para hacerlo de forma segura y efectiva. Nunca, bajo ningún concepto, resulta aconsejable manipularlo en casa, ya que como consecuencia podrían aparecer infecciones o complicaciones. Con el tratamiento adecuado, la gran mayoría de los quistes sebáceos pueden eliminarse con éxito, así que confía en un profesional para ello.