El mangostán, conocido también como mangostino o mangostín, es una fruta tropical que, aunque aún poco común en algunas regiones como España, destaca no solo por su sabor dulce y meloso, sino por sus múltiples propiedades beneficiosas para la salud. Originario del sudeste asiático y también encontrado en algunas regiones de América del Sur, el mangostán ha ganado el título de «reina de las frutas» y está respaldado tanto por la medicina tradicional oriental como por investigaciones científicas actuales.
El árbol del mangostán, cuyo nombre científico es Garcinia mangostana, produce un fruto con una característica cáscara de tonalidad púrpura y una pulpa blanca de textura jugosa. Este exótico fruto es particularmente rico en compuestos bioactivos, vitaminas, minerales y antioxidantes, lo que lo convierte en un superalimento altamente cotizado.
En este artículo profundizaremos en todas las propiedades, usos y beneficios del mangostán, y te mostraremos cómo incorporar esta fruta a tu dieta diaria para aprovechar todas sus cualidades.
Propiedades nutricionales del mangostán
El mangostán es un fruto bajo en grasas saturadas y colesterol, pero extremadamente rico en nutrientes esenciales. Esto lo convierte en una opción ideal para personas que buscan mejorar su salud general mientras disfrutan de un tentempié natural y delicioso. Las propiedades nutricionales más destacadas del mangostán incluyen:
- Antioxidantes: Altamente rico en xantonas, un tipo de antioxidante natural que combate los radicales libres y protege contra el envejecimiento celular.
- Vitaminas: Contiene vitamina C, que refuerza el sistema inmunológico, y vitaminas del complejo B como tiamina, riboflavina y niacina, que ayudan en el metabolismo de los nutrientes.
- Minerales: Su contenido en potasio, magnesio y calcio contribuye a la salud cardiovascular, la función muscular y el fortalecimiento de los huesos.
- Fibra: Con una buena cantidad de fibra dietética, el mangostán mejora la digestión y ayuda a combatir el estreñimiento.
- Calorías bajas: Con cerca de 63 calorías por cada 100 gramos, es ideal para quienes buscan mantener una dieta equilibrada sin un alto aporte de calorías.
Principales beneficios del mangostán para la salud
El uso del mangostán tanto en la medicina tradicional como en la moderna ha destacado por tratar un abanico amplio de problemas de salud y mejorar la calidad de vida. Estos son algunos de los beneficios más importantes respaldados por estudios científicos:
1. Propiedades antioxidantes y antienvejecimiento
El mangostán es conocido por su contenido extraordinariamente alto en xantonas, compuestos fenólicos que actúan como potentes antioxidantes. Estos antioxidantes reducen el daño celular causado por los radicales libres, lo que contribuye a:
- Prevenir el envejecimiento prematuro: Protege la piel y otros órganos del daño oxidativo.
- Prevenir enfermedades crónicas: Como enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer.
De hecho, la cáscara del mangostán contiene hasta 40 tipos diferentes de xantonas, superando a otros alimentos antioxidantes como el aloe vera.
2. Salud cardiovascular
Gracias a su contenido en potasio, magnesio y compuestos antioxidantes, el mangostán ayuda a mantener una buena salud del corazón:
- Controla la presión arterial: El potasio elimina el exceso de sodio del organismo, reduciendo la hipertensión.
- Reducción del colesterol: Las fibras y antioxidantes limitan la absorción de grasas en el intestino, reduciendo los niveles de colesterol LDL.
Esto, combinado con su capacidad para mejorar la circulación sanguínea, lo convierte en un alimento recomendado para personas con riesgo de enfermedades cardiovasculares.
3. Propiedades antiinflamatorias
El mangostán contiene compuestos como el gamma-mangostín, que posee efectos antiinflamatorios significativos. Esto lo convierte en una alternativa natural al tratamiento de algunas condiciones inflamatorias como:
- Artritis: Ayuda a reducir la inflamación y aliviar el dolor articular.
- Asma: Mejora los síntomas al reducir la inflamación de las vías respiratorias.
- Inflamación estomacal: Protege el revestimiento gástrico y alivia molestias como la gastritis.
4. Mejora del sistema digestivo
El mangostán es una excelente opción para mantener una salud digestiva óptima gracias a su contenido en fibra y propiedades antiinflamatorias. Los beneficios incluyen:
- Reducción del estreñimiento: Las fibras favorecen el tránsito intestinal.
- Alivio de la disentería y diarrea: Utilizado tradicionalmente como tratamiento para estos problemas digestivos.
- Equilibrio de enzimas digestivas: Fortalece el hígado y mejora la digestión de grasas y carbohidratos.
5. Ayuda en la pérdida de peso
Con pocas calorías y un alto contenido en fibra y agua, el mangostán tiene un efecto saciante y puede ayudar en la pérdida de peso. Además, contiene ácido hidroxicítrico (AHC), una sustancia que inhibe la formación de grasas y su acumulación en el cuerpo.
- Aumenta la saciedad: Lo que reduce el consumo de alimentos y calorías.
- Regula el metabolismo: Estimula la quema de grasas.
Estudios realizados en mujeres obesas han demostrado que la suplementación con extracto de mangostán puede duplicar la cantidad de peso perdido en comparación con el grupo placebo.
6. Propiedades antitumorales
Investigaciones recientes sugieren que los compuestos bioactivos del mangostán, particularmente las xantonas, poseen propiedades anticancerígenas. Estas sustancias pueden:
- Inhibir el crecimiento de células cancerosas: Ayudando a prevenir y tratar ciertos tipos de cáncer.
- Inducir la apoptosis: O muerte celular programada en células malignas.
Estas propiedades han sido observadas en investigaciones realizadas sobre cáncer de mama, pulmón, colon y piel, aunque aún se necesita más investigación en humanos para confirmar estos efectos.
Cómo consumir el mangostán
Si deseas incorporar esta fruta exótica en tu dieta, hay varias formas de hacerlo, tanto en su forma fresca como en suplementos:
1. Fruto fresco
La mejor manera de disfrutar el mangostán es consumiéndolo fresco. Para abrirlo, corta la cáscara por la mitad con un cuchillo y retira sus gajos blancos. Esta opción es perfecta para comer como un snack saludable o para añadir a ensaladas y postres.
2. Zumo y batidos
Otra forma popular es preparar un delicioso zumo de mangostán, que conserva todos sus nutrientes y ofrece una bebida refrescante cargada de beneficios. También puedes añadirlo a tus batidos matutinos para potenciar su valor nutricional.
3. Harina o extracto
La harina de mangostán, elaborada a partir de su cáscara, es ideal para añadir a recetas de repostería o espolvorear sobre yogures y ensaladas. Por otro lado, los suplementos en cápsulas o concentrados son una alternativa práctica para quienes buscan un aporte constante de sus beneficios.
El mangostán es más que una simple fruta: es un recurso natural lleno de propiedades que pueden transformar tu salud si sabes cómo aprovecharlo. Aunque todavía es difícil de encontrar en algunos mercados, su creciente popularidad hace que tanto el fruto fresco como sus derivados sean cada vez más accesibles. Integrar el mangostán en tu dieta puede ser una decisión que no solo enriquezca tu paladar, sino también tu bienestar general.