La porrusalda, cuya traducción literal significa «caldo de puerros» en euskera, es una de las recetas más emblemáticas de la gastronomía vasca. Este plato tradicional se ha adaptado a los tiempos modernos, incorporando variantes y ingredientes que enriquecen su sabor y propiedades nutricionales. En esta ocasión, vamos a preparar una versión única de la porrusalda con garbanzos que la convierte en un plato único, saludable y muy completo.
Se trata de un plato que, aunque tradicionalmente se disfrutaba como una receta sencilla y económica, ha evolucionado para incluir nuevos ingredientes. En esta receta, los garbanzos no solo aportan textura sino también proteínas, haciendo de este caldo una opción perfecta para quienes buscan alternativas saludables y nutritivas. Además, dada su versatilidad, puedes personalizarla con los ingredientes que tengas a mano.
¿Quieres aprender a preparar esta deliciosa porrusalda con garbanzos? Sigue leyendo para descubrir una receta paso a paso con consejos útiles y trucos para optimizar tiempos en la cocina.
Ingredientes para la Porrusalda con Garbanzos
Estos son los ingredientes que necesitarás para preparar una porrusalda para aproximadamente 4 raciones. Los productos básicos son los puerros, las patatas y los garbanzos, pero puedes adaptar la receta según lo que tengas en la nevera:
- 1 cebolla, picada finamente.
- 1/2 pimiento verde, opcional, también picado.
- 4 zanahorias, peladas y en rodajas.
- 4 puerros grandes, incluyendo la parte blanca y algo de la parte verde.
- 3 patatas, peladas y cortadas en trozos.
- 1 litro de caldo de verduras.
- 3 tazas de garbanzos cocidos (pueden ser de bote, previamente lavados).
- Aceite de oliva, para el sofrito.
- Sal y especias, como la pimienta negra o el laurel, al gusto.
Cómo Preparar la Porrusalda con Garbanzos
- Haz un sofrito básico. En una cazuela amplia, calienta un fondo de aceite de oliva a fuego medio. Sofríe la cebolla, el pimiento si lo usas y la zanahoria durante 6-7 minutos. Remueve ocasionalmente para que no se queme.
- Prepara los puerros. Lava bien los puerros para eliminar cualquier resto de tierra. Córtalos en rodajas finas y añádelos al sofrito. Tapa la cazuela y cocina durante otros 6-7 minutos hasta que estén tiernos y bien integrados.
- Incorpora las patatas. Pela las patatas y cháscalas, un truco que permite que liberen almidón y den más cuerpo al caldo. Agrégalas a la cazuela y rehoga durante unos minutos para que adquieran sabor.
- Añade el caldo y cocina. Cubre las verduras con el caldo de verduras (puedes usar agua con unas pastillas de caldo si no tienes caldo casero) y lleva todo a ebullición. Cocina durante unos 20 minutos a fuego lento, o hasta que las patatas estén tiernas. Este paso permite que todos los ingredientes se integren perfectamente.
- Finaliza con los garbanzos. Cinco minutos antes de apagar el fuego, incorpora los garbanzos cocidos. Esto asegura que se calienten y absorban los sabores del caldo sin deshacerse.
Consejos y Variantes para Personalizar la Receta
La porrusalda es un plato muy adaptable, y existen diversas formas de personalizarla para que se ajuste a tus gustos o necesidades:
- ¿Prefieres una versión vegana o más ligera? Esta receta ya lo es, pero puedes enriquecerla con especias como cúrcuma, jengibre o comino.
- Sustituye o añade ingredientes: Puedes incorporar calabaza para darle un toque dulce o añadir un poco de bacalao desmigado casi al final de la cocción para un aporte proteico adicional.
- ¿Te sobra porrusalda? Tritura lo que quede y obtendrás una crema de verduras deliciosa para aprovechar las sobras.
- Caldo casero: Si tienes tiempo, prepara tu propio caldo de verduras con las partes verdes de los puerros, zanahorias y cáscaras de patatas.
Este plato, además de ser muy saludable, tiene un fuerte componente de tradición y nostalgia. Es ideal para esos días fríos cuando buscas algo que reconforte el cuerpo y el espíritu. También, al incluir garbanzos, se convierte en una opción equilibrada para cualquier comida o cena sin necesidad de acompañamientos adicionales. Anímate a prepararla y a disfrutar de un auténtico pedazo de la cocina vasca en tu hogar.