Si pensamos en una lasaña, probablemente la primera imagen que se nos venga a la cabeza sea la de carne a la boloñesa. Todo un clásico que nunca pasa de moda, y es que esta receta italiana ha logrado conquistar paladares alrededor del mundo por su delicioso sabor y versatilidad.
La lasaña no solo nos permite disfrutar de la pasta de una manera diferente, sino que también admite una amplia variedad de ingredientes y combinaciones. Aunque la versión de carne es la más popular, también es posible prepararla con verduras, pescado o marisco, adaptándose a los gustos y necesidades de cada persona.
Ingredientes para preparar lasaña de carne a la boloñesa (Para 4 personas)
Ingredientes principales:
- 16 placas de lasaña (pueden ser precocidas o tradicionales).
- 70 gr. de queso rallado (mozzarella o emmental).
- Orégano al gusto.
- Aceite de oliva virgen extra y sal.
Para la salsa boloñesa:
- 300 gr. de carne picada (ternera, cerdo o una mezcla de ambas).
- 1 zanahoria.
- 1 cebolla.
- 200 gr. de salsa de tomate o tomate frito de calidad.
- 1 vaso de vino blanco.
- 50 ml. de leche entera.
- Orégano al gusto.
- Sal y pimienta negra recién molida.
Para la salsa bechamel:
- 1/2 litro de leche entera.
- 2 cucharadas de harina de trigo.
- 3 cucharadas de mantequilla.
- Una pizca de nuez moscada molida.
- Sal al gusto.
Preparación paso a paso de la lasaña de carne a la boloñesa
1. Preparación de la salsa boloñesa
Esta salsa es la base que le da sabor a nuestra lasaña. Comenzamos picando finamente la cebolla y la zanahoria. En una sartén grande, añadimos un buen chorro de aceite de oliva y lo calentamos a fuego medio. Incorporamos la cebolla y la zanahoria, rehogándolas hasta que la cebolla se vuelva transparente.
A continuación, añadimos la carne picada. Con ayuda de una espumadera o cuchara de madera, la desmenuzamos mientras se cocina. Agregamos sal, pimienta y orégano al gusto.
Cuando la carne pierda su color rosado, vertemos el vaso de vino blanco y dejamos que el alcohol se evapore (aproximadamente 5 minutos). Luego, añadimos la salsa de tomate y la leche. Cocemos a fuego lento durante unos 15 minutos, removiendo ocasionalmente para que los sabores se mezclen bien y la salsa adquiera una textura suave.
2. Preparación de las placas de lasaña
Si utilizamos placas precocidas, solo hay que remojarlas en agua caliente durante el tiempo indicado por el fabricante. Por otro lado, si las placas son tradicionales, las cocemos en agua hirviendo con sal durante unos minutos. En ambos casos, es fundamental evitar que las placas se peguen entre sí, así que recomendamos sumergirlas de forma separada en un recipiente amplio.
3. Elaboración de la salsa bechamel
En un cazo, derretimos la mantequilla a fuego medio. Una vez líquida, añadimos la harina y mezclamos rápidamente con unas varillas para que no se formen grumos. Cocinamos esta mezcla durante un par de minutos para eliminar el sabor crudo de la harina.
Poco a poco, incorporamos la leche caliente mientras removemos constantemente. Continuamos hasta obtener una salsa suave y con la consistencia deseada. Sazonamos con sal y añadimos una pizca de nuez moscada.
4. Montaje de la lasaña
Precalentamos el horno a 200 ºC. Mientras tanto, en una bandeja apta para horno, extendemos una capa fina de salsa bechamel en la base. Colocamos 4 láminas de lasaña y las cubrimos con una capa de salsa boloñesa.
Repetimos el proceso: placas de lasaña, boloñesa y una fina capa de bechamel. Continuamos hasta completar tres capas y finalizamos con una última capa de láminas de pasta. Cubrimos con una cantidad generosa de salsa bechamel y espolvoreamos queso rallado por encima. Si deseamos un toque adicional, podemos añadir un poco más de orégano.
5. Hornear la lasaña
Introducimos la bandeja en el horno y cocinamos durante 15 minutos a 180 ºC. Activamos la función de gratinado durante los últimos 5 minutos para que el queso se dore ligeramente. Una vez lista, dejamos reposar la lasaña fuera del horno durante 5 minutos antes de cortarla y servirla.
Consejos para una lasaña perfecta
- Ingredientes de calidad: Utilizar una buena carne picada, un tomate de calidad y un queso fundente marcará la diferencia en el resultado final.
- Tiempo de reposo: Dejar reposar la lasaña unos minutos antes de cortar permitirá que se asienten las capas y sea más fácil de servir.
- Variaciones creativas: Para darle un toque diferente, puedes añadir espinacas, champiñones o utilizar láminas de calabacín en lugar de pasta.
Esta receta de lasaña es ideal para compartir en reuniones familiares o con amigos. Aunque puede parecer laboriosa, el esfuerzo vale la pena al ver la satisfacción de quienes la prueban. Prepárala con dedicación y disfruta de este delicioso plato italiano que nunca pasa de moda.
