El falafel, para quienes aun no lo conozcáis, es una croqueta de garbanzos triturados. Una preparación que se sirve tradicionalmente con salsa de yogur o de tahina, pero que podéis acompañar con cualquier otra salsa de vuestro gusto. Por ejemlo, una buena salsa de tomate casera o de yogur especiada.
Estos falafel con espinacas, llevan además de los ingredientes obvios otros que contribuyen a darles sabor como el ajo, el perejil, la cebolla o el comino en grano. Es muy sencillo preparlas; solo tendrás que acordarte de poner los garbanzos a remojo la noche anterior.
Ingredientes
- 350 g de garbanzos a remojo
- 4 dientes de ajo, majados
- 200 g. de espinacas frescas
- 1 puñado de perejil fresco
- 2 cucharaditas de comino
- 1 cucharadita de semillas de sesamo molidas
- 2 cebollas medianas
- 1 guindilla de cayena (opcional)
- Sal
- Aceite para freír
Paso a paso
- La noche anterior pon a remojo los garbanzos para tenerlos listos.
- Pon las espinacas limpias en un bol y cocínalas en el microondas hasta que estén lacias. Después, escúrrelas del líquido estrujándolas muy bien. Yo lo hago poniéndolas en un volador y presionando con un cacillo.
- Maja los ajos en el mortero con un buen pellizco de sal. Incorpora el comino y las semillas de sésamo molidas y trabaja la mezcla otro par de minutos.
- Escurre muy bien los garbanzos y tritúralos en un robot de cocina hasta obtener una mezcla basta.
- A continuación añade las cebollas crudas en trozos, la guindilla, las espinacas, y la mezcla de ajos majados y tritura de nuevo.
- Toma porciones del tamaño de una nuez y moldealas en forma de bolitas. ¿Está la mezcla muy aguada y no puedes formar las bolas? Añade un poco de harina o pan rallado.
- Cuando hayas formado todas las bolitas, calienta aceite de oliva virgen en una sartén pequeña y fríe los falafel por tandas, como lo harías con unas croquetas.
- Una vez dorados, sácalos y ponlos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.