Con la llegada de la menopausia, las mujeres van a experimentar una serie de cambios importantes en su cuerpo y emociones. Uno de dichos cambios suele ser la hinchazón en la zona del vientre. La hinchazón suele ser una compañera de viaje algo incómoda a la vez que persistente.
En el siguiente artículo vamos a hablar de una manera más detallada de la hinchazón en la menopausia y de las mejores formas de tratarla.
Comprendiendo un poco la menopausia
Antes de abordar el problema de la hinchazón, es fundamental y esencial el comprender los diferentes cambios hormonales que caracterizan la menopausia. El cuerpo de la mujer está atravesando una transición significativa, marcada por una disminución de los niveles de estrógeno y progesterona. Estas fluctuaciones de tipo hormonales van a desencadenar una serie de síntomas en la mujer, siendo la hinchazón uno de ellos.
Motivos por los que se produce la hinchazón
La retención de líquidos es una de las causas principales de que se produzca una hinchazón durante la etapa de la menopausia. La disminución de los niveles de estrógeno puede afectar la regulación de los fluidos en tu cuerpo, llevando a la acumulación de agua en tejidos y articulaciones. Además de todo esto, los cambios que sufre la mujer en su metabolismo y la actividad física pueden contribuir a que se produzca la citada hinchazón.
Alimentación equilibrada y saludable
Una dieta equilibrada desempeña un papel clave a la hora de gestionar de manera adecuada la hinchazón durante la menopausia. Es por ello que es aconsejable el ingerir alimentos ricos en potasio, como plátanos y espinacas y ayudar de esta manera a regular los niveles de sodio y reducir la retención de líquidos. Asimismo, es importante el mantener un consumo adecuado de agua para evitar la deshidratación, un factor que puede contribuir a la hinchazón.
Ejercicio físico
Aunque durante la menopausia la mujer se sienta algo desmotivada y con falta de energía, es importante hacer algo de ejercicio físico. Hay que incorporar ejercicios que sean de bajo impacto, como es el caso de caminar o nadar, para estimular la circulación y reducir la retención de líquidos. En cualquier caso es bueno el consultar a un profesional de la salud antes de comenzar con el ejercicio físico para adaptarlo de la mejor manera a las necesidades de la mujer en cuestión.
Manejar el estrés
Unos altos niveles de estrés puede agravar la hinchazón, así que es fundamental incorporar a la vida diaria una serie de estrategias que permitan manejar el estrés en la vida diaria. Practicar la meditación, el yoga o simplemente tomarse algo de tiempo para relajarse puede tener un impacto importante en el bienestar general y ayudar a controlar la hinchazón relacionada con el estrés.
Remedios naturales contra la hinchazón
Ciertas opciones naturales pueden ayudar de una manera adecuada al tratamiento. La borraja es una planta que es conocida por sus propiedades antiinflamatorias y puede ayudar a reducir la retención de líquidos. Sin embargo, antes de incorporar cualquier suplemento a la rutina, es aconsejable consultar con un profesional de la salud para asegurarse de que dichos remedios naturales sean óptimos y beneficiosos para la mujer.
Apoyo emocional
La menopausia no solo afecta al cuerpo de una manera física, sino también a las emociones. Es por ello que es clave el buscar algo de apoyo emocional. Es bueno hablar con amigos, familiares o buscar grupos de apoyo para poder compartir las experiencias y aprender de los demás. Un enfoque integral tanto del bienestar físico como emocional es importante a la hora de manejar la hinchazón y otros síntomas propios de la menopausia.
En definitiva, la hinchazón es uno de los síntomas más habituales de la menopausia. Dicha hinchazón es bastante molesta por lo que resulta clave el encontrar estrategias que ayuden a gestionar de manera efectiva tal problema. Lo realmente importante es encontrar cierto bienestar general que ayude a sentirse bien en dicha etapa de la vida.