El lavavajillas es uno de los electrodomésticos más valorados en el hogar, ya que nos permite ahorrar tiempo y esfuerzo en la limpieza de utensilios de cocina. Sin embargo, para garantizar su buen funcionamiento y prolongar su vida útil, es fundamental realizar un mantenimiento adecuado y una limpieza periódica. A lo largo de este artículo, te ofrecemos una guía completa para limpiar y mantener tu lavavajillas en condiciones óptimas.
Importancia de la limpieza del lavavajillas
El lavavajillas almacena restos de comida, grasa y cal que, si no se eliminan, pueden generar malos olores, disminuir la eficiencia del electrodoméstico y acortar su vida útil. Limpiarlo regularmente no solo asegura que los platos, vasos y cubiertos queden perfectamente limpios, sino que también protege las partes internas de daños provocados por la acumulación de residuos.
Además, al mantener limpio tu lavavajillas, evitarás problemas comunes como la obstrucción de los filtros, el mal funcionamiento de las aspas o la acumulación de cal en sus componentes internos.
Pasos esenciales para limpiar el lavavajillas
Puerta y gomas
La puerta del lavavajillas es un lugar donde tienden a acumularse restos de comida y humedad. Para limpiarla, utiliza un paño húmedo y un detergente suave. Presta especial atención a las gomas de la puerta, ya que suelen almacenar moho y suciedad. Límpialas cuidadosamente y sécalas con un paño seco para evitar la proliferación de bacterias.
El compartimento de detergente
Este es otro punto que muchas veces se pasa por alto. Si la pastilla de detergente no se disuelve por completo, pueden quedar residuos acumulados. Para limpiarlo, utiliza un cepillo pequeño o un paño húmedo. Esta tarea es recomendable realizarla semanalmente.
El filtro
El filtro es una de las partes más importantes del lavavajillas, ya que atrapa los restos de comida y evita obstrucciones en la bomba de desagüe. Para limpiarlo:
- Extrae la bandeja inferior del lavavajillas para acceder al filtro.
- Gíralo en sentido antihorario para retirarlo.
- Enjuágalo bajo el grifo con agua tibia y utiliza un cepillo para eliminar los residuos acumulados.
- Si el filtro está muy sucio, déjalo en remojo con una mezcla de agua, jabón y bicarbonato durante unos minutos antes de frotarlo.
- Seca el filtro y vuelve a colocarlo en su lugar.
Aspas o brazos rociadores
Las aspas son responsables de distribuir el agua durante el lavado. Con el tiempo, sus orificios pueden obstruirse debido a la acumulación de cal y residuos. Para limpiarlas:
- Desmonta las aspas girándolas ligeramente o siguiendo las instrucciones del manual de tu lavavajillas.
- Pasa un alambre fino por los orificios para eliminar cualquier residuo.
- Enjuágalas con agua tibia y un detergente suave.
- Vuélvelas a colocar asegurándote de que giren libremente.
Ciclo de lavado con vinagre
Una vez al mes, programa un ciclo de lavado vacío para limpiar el interior del lavavajillas en profundidad. Añade un vaso de vinagre blanco en el compartimento superior o directamente en la base del electrodoméstico y selecciona el programa más caliente. El vinagre ayudará a eliminar la grasa, los restos de comida y la cal acumulada.
El depósito de sal y abrillantador
Mantener el depósito de sal y el de abrillantador en niveles óptimos es clave para evitar la acumulación de cal y garantizar un secado perfecto de la vajilla. Revisa regularmente los niveles y rellénalos siguiendo las indicaciones del fabricante de tu lavavajillas.
Consejos extras para mantener tu lavavajillas en buen estado
- Evita restos de comida: Retira los restos de comida grandes antes de colocar los platos en el lavavajillas para evitar obstrucciones.
- Elige detergentes de calidad: Opta por productos específicos para lavavajillas, ya que están especialmente formulados para cuidar los componentes internos.
- Deja la puerta entreabierta: Una vez finalizado el lavado, permite que el interior del lavavajillas se ventile para evitar la acumulación de humedad y malos olores.
- Utiliza limpiadores específicos: Cada dos meses, aplica un producto limpiamáquinas para eliminar residuos ocultos en las tuberías y otras partes internas.
Mantener tu lavavajillas limpio y en buen estado no requiere mucho esfuerzo si sigues una rutina básica de limpieza. Esto no solo te asegurará platos impecables, sino que también prolongará la vida útil del electrodoméstico, mejorando su eficiencia y ahorrándote gastos innecesarios en reparaciones o sustituciones.