En términos médicos, seguro que has oído hablar de los antisépticos y sus posibles usos, pero sabrías decir con tus palabras qué son y para qué sirven o cómo se usan.
Hoy os decimos qué son los antisépticos y cómo se usan. Si quieres saber un poquito más sobre ellos, sigue leyendo un poco más.
Antisépticos, ¿qué son y cómo usarlos?
Antes de hablar de los antisépticos como tal debemos saber una serie de conceptos a tener en cuenta:
- Desinfección: Destrucción de microorganismos patógenos en superficies inanimadas o inertes mediante el uso de productos químicos denominados desinfectantes.
- Bactericida: Sustancia química que elimina los microorganismos e impide su crecimiento.
- Antisepsia: Destrucción de microorganismos patógenos en tejidos vivos (piel, herida,…) mediante la aplicación de productos químicos denominados antisépticos.
- Bacteriostático: Sustancia química que impide el crecimiento de los microorganismos mientras dura su acción.
- Herida infectada: Los microorganismos de la herida invaden los tejidos que rodean la lesión. Existen signos de infección (edema, calor en la herida, dolor, hinchazón, enrojecimiento, etc.)
- Herida contaminada: Cuando el numero de microorganismos es de 100.000 colonias por gramo de tejido y no existen signos clínicos de infección local.
Los antisépticos tienen como finalidad la de eliminar los microorganismos o inactivar los virus. No tienen actividad selectiva ya que eliminan todo tipo de gérmenes.
Tipos de antisépticos que podemos encontrar
Ahora os decimos qué antisépticos podemos encontrar en el mercado o tenemos habitualmente por casa. También os decimos que tipo de acción tiene, cuando empiezan a funcionar, su seguridad y las contraindicaciones que suelen encontrarse en ellos.
- Alcohol: Ataca a bacterias y virus. Empieza a funcionar pasados 2 minutos; Es inflamable y no está pensado para heridas abiertas.
- Clorhexidina: Ataca a bacterias, esporas, virus y hongos. Empieza a actuar pasados de 15 a 30 a segundos. Tiene un 4% de daño en tejido y no se han descrito contraindicaciones.
- Yodo: Ataca a bacterias, virus y hongos. Empieza a actuar a los 3 minutos de aplicarse y retrasa el crecimiento del tejido. No puede usarse en embarazadas, lactantes, recién nacidos o en gente con trastornos del tiroides.
- Agua oxigenada: Sirve para las bacterias y para el 3% de los virus. Tiene un efecto inmediato pero es inactivo ante la presencia de luz y aire. Como principal contraindicación es que lesiona los tejidos en cavidades cerradas.
Y tú, ¿eres de usar un solo antiséptico o tienes varios de los vistos anteriormente en casa?