Las baldas de madera son muy útiles a la hora de crear espacios de almacenaje en nuestra casa. Estas tablas dispuestas horizontalmente, tal como las define la RAE son un recurso sencillo y versátil que podemos incorporar a cualquier estancia, desde el cuarto del baño o la cocina a la sala o el dormitorio infantil.
Las baldas de madera son visualmente ligeras. Recargan menos la habitación de lo que lo haría un sistema de almacenamiento cerrado, por lo que son ideales para decorar espacios pequeños. Son prácticas pero también decorativas; aportan calidez y una nota de color a cualquier pared.
Cómo fijar las baldas de madera a la pared
Puedes colocar las baldas en la pared utilizando distintos sistemas de fijación: atornillando las baldas en la pared para lograr una estética minimalista, utilizando soportes que aporten valor decorativo a las mismas o colocándolas entre dos paredes y fijándolas a las mimas.
Baldas flotantes
Fijar las baldas de madera de forma que ningún elemento adicional les robe protagonismo es la alternativa escogida por aquellos que buscan una estética minimalista. Es el sistema mas popular para decorar hogares de inspiración nórdica en los que además las baldas se pintan del color de la pared -blanco principalmente- para que no destaquen en exceso. Si, por el contrario, deseas llamar la atención sobre este elemento, apuesta por baldas que contrasten en color con la pared. Cuanto mayor sea el contraste, mas destacarán.
Baldas con soportes vistos
Los soportes aportan personalidad al conjunto y nos permiten fijarlas de forma mas cómoda. A través de estos soportes puedes además fomentar el carácter rústico de baldas de madera natural, aportar un toque industrial a las mismas o lograr un punto de originalidad único y característico. En el mercado encontrarás una gran variedad de escuadras y portaestantes, fabricados en diferentes materiales y con diferentes acabados.
Baldas de madera colgantes
También pueden utilizarse como soporte cuerdas o cordeles y decorar estos con bolas de madera u otros detalles para darles un toque personal. O apostar por una de las tendencias del momento y colgar las baldas de cinturones de cuero. Este tipo de creaciones, que tu mismo puedes imitar en casa, son menos estables que las anteriores pero resultan muy decorativas. Coloca sobre ellas algún cactus, alguna figura de cerámica o tu libro favorito y decora con ellas tu dormitorio.
Nichos con baldas de madera
En este caso las baldas de madera se fijan entre dos paredes. Normalmente en un nicho, un hueco generado en la pared de obra o bien entre dos armarios previamente instalados. Los nichos suelen proporcionarnos ya sea en el salón, en el cuarto de baño o en el dormitorio un gran espacio de almacenaje, además de rincones muy apropiados para instalar un rincón de lectura o de estudio. 
Dónde colocar baldas de madera
Como ya hemos mencionado anteriormente, las baldas de madera tienen cabida en cualquier espacio: recibidor, cocina. cuarto de baño, salón, dormitorio… Suelen utilizarse como elementos auxiliares para lograr almacenamiento extra y al mismo tiempo espacios mas abiertos y ligeros, visualmente.
Se recurre con frecuencia a las baldas de madera en la cocina, como complemento a los armarios cerrados. Son además mas económicas que estos y pueden ayudarnos a darle a la cocina un estilo mas personal. Convertilas en las protagonistas del frente de cocina, es toda una tendencia. Con el mismo objetivo, la de ganar espacio de almacenamiento las utilizamos en el cuarto de baño, si bien en este espacio las encontramos habitualmente vistiendo nichos de obra junto a la ducha.
Los nichos son también habituales en los salones, donde habitualmente se utilizan bien como librería, bien como zona de estudio o trabajo. En los salones también podemos encontrar, con relativa frecuencia, baldas de madera decorando la pared del sofa. Sobre ella suelen colocarse recuerdos familiares o trabajos de nuestros artistas favoritos que nos transmiten paz. Estos son los importantes y por tanto deben destacar sobre la balda, algo que será mucho mas sencillo si apostamos por un diseño flotante y/o mimetizado con la pared.
De la misma forma que las utilizamos en el salón podemos utilizarlas en el despacho o el dormitorio. En esta última estancia son frecuentes las baldas de madera colgantes por su poder decorativo. Si el espacio de almacenaje no es un problema, estan son suficientes para tener a la vista aquellos objetos que nos hacen felices.
¿Y tu? ¿Utilizas baldas de madera para decorar tu hogar?