Para que una relación funcione y perdure en el tiempo está claro que debe amor entre las partes. Aparte de dicho afecto otro elemento que puede resultar esencial dentro la relación es la atracción física. El sentirse atraído de manera mutua tanto a nivel físico como emocional ayuda a que la pareja sea feliz y se haga fuerte.
Sin embargo mucha gente se pregunta si es posible que en determinadas parejas, exista amor cuando no hay ningún tipo de atracción física. En el siguiente artículo damos respuesta a dicha pregunta y te explicamos si de verdad la atracción física es esencial en una relación.
La atracción física en la relación de pareja
La atracción física no es más que la química que sienten dos personas que se atraen de manera mutua. No cabe duda de que dicha atracción es importante al comienzo de la relación. Lo normal es que cuando se cree un vínculo se produzca una fuerte atracción tanto desde el punto de vista físico como emocional. Mucha gente suele tener dudas al comienzo de una relación, de si lo que siente hacia la otra persona es atracción. No es lo mismo el cariño que se pueda sentir hacia otra persona, que el hecho de estar enamorado o sentirse atraído.
En el caso de tener serias dudas sobre ello, lo mejor es analizar los sentimientos que se pueda tener hacia la pareja. Puede ocurrir que la persona se confunda y la relación no termine de funcionar. Y se acabe rompiendo Lo que si debe quedar claro es que para que se formalice una determinada relación, debe existir cierta atracción de manera mutua además del afecto y del amor.
El paso del tiempo en la pareja
Muchas parejas son conscientes de que el paso del tiempo, puede ir haciendo mella en la chispa y en la pasión que había al comienzo de la relación. Depende de ambas personas el conseguir que dicha atracción se mantenga a pesar del tiempo transcurrido. Es por ello que hay que saber cuidar la llama a diario, con el fin de mantenerla encendida y evitar que se pueda apagar.
De todas maneras hay que indicar que con el paso de los años, la atracción física que se da al comienzo de una relación debe dar paso al amor y al cariño entre las partes. Sin embargo ello no es pretexto para que la atracción y la chispa ocupe un lugar importante dentro de una determinada relación. Lo ideal es poder disfrutar de ambos elementos y conseguir que la pareja sea feliz y tenga cierto bienestar.
Cómo mantener la chispa y la atracción física en la pareja
Hay parejas que con el paso de los años van perdiendo la chispa del principio y ya no existe esa atracción física tan importante para la propia pareja. Ciertos problemas y algunas que otras dificultades pueden provocar que la relación se resienta, llegando a diluirse por completo la atracción física. Sin embargo es posible volver a recuperar la chispa dentro de la pareja. No dudes por tanto en sorprender a la otra persona con una bonita cena romántica o realizando una escapada que ayude a que vuelva a renacer la llama perdida. Este tipo de detalles hacia la pareja pueden ayudar a que la atracción física vuelva a tener cierta importancia dentro del vínculo creado.
En definitiva, se puede decir que la atracción física es un elemento vital y fundamental en cualquier relación de pareja. El paso del tiempo no debe ser una excusa para que se termine apagando la llama de la pasión. Aunque es verdad que para una relación que perdure en el tiempo, lo verdaderamente importante es el amor y el afecto, la atracción física debe seguir teniendo su papel primordial en la misma. Hay que huir de la rutina y conseguir que la pasión siga estando presente en el día a día de la relación.