Esta pregunta se la hacen muchos padres, ¿es buena idea que un hijo adolescente tenga mucha vida escolar teniendo en cuenta que tiene unas obligaciones académicas y en casa que cumplir? En realidad, un adolescente no debe estar siempre metido en casa estudiando… El equilibrio entre la vida escolar y la escuela es de vital importancia para el óptimo funcionamiento académico.
La vida sigue siendo una serie de acontecimientos que la constituyen. Nunca se debe permitir que la importancia de una esfera tenga un impacto adverso en la otra. La interrelación exitosa y en evolución entre las diferentes esferas y facetas de la vida requiere un enfoque equilibrado que sea capaz de estructurar y priorizar. A menudo, una esfera puede exigir más atención y disfrutar de prioridad sobre otras. Sin embargo, los estudiantes a menudo dan prioridad a lo académico a costa de factores personales, incluidas las relaciones y el ejercicio.
Todos hemos escuchado el adagio, ‘un cuerpo sano, una mente sana’. Si se descuida el ámbito social y personal muy importante, se puede producir una disminución en el rendimiento académico, ya que la salud general y el bienestar son fundamentales para el funcionamiento académico óptimo. Pero, ¿es importante tener una vida social activa en la etapa adolescente cuando lo escolar debe priorizarse?
El secreto: un buen equilibrio
Es importante mantener un buen equilibrio porque al desarrollar habilidades sociales los adolescentes se construyen como personas. Le ayuda en el proceso de desarrollar habilidades interpersonales e intrapersonales. Uno no puede enfatizar lo suficiente lo importante que es tener habilidades sociales. Podría ser la persona más inteligente del mundo, pero una persona significativamente menos inteligente con mejores habilidades sociales aún tendría una ventaja sobre los demás, por ejemplo, durante una entrevista de trabajo. Cuanto más estás cerca de la gente, más practicas estas habilidades.
También de manera bastante significativa, tener una vida social bien equilibrada inevitablemente hace que te encuentres con algunas situaciones bastante desagradables. Por ejemplo, podría involucrarse en una pelea con un amigo o enfrentar problemas de traición y falta de confianza. Como seres sociales, es necesario involucrar los rigores y los desafíos de la vida para mejorar el aprendizaje y experimentar un sentido de pertenencia. Aprender de la experiencia es lo más beneficioso en la vida de cualquier asistente escolar. Cuanto más se encuentre con dichas situaciones ahora, menos problemas le dará en el futuro.
Los beneficios de un compromiso consciente y constructivo de una vida tanto académica como social se encuentran en las habilidades para la vida que puedes enseñar. Puedes proporcionarle un repertorio cada vez mayor de herramientas emocionales con las que abordar las fortunas fluctuantes de la vida.
El éxito académico sin duda puede proporcionarle un estándar y calidad de vida que le proporcionará placeres y comodidades materiales. Sin embargo, sin la estabilidad emocional que requiere su éxito, no podrá obtener todos los beneficios del éxito académico.
En este sentido, lo ideal es que le des a tus hijos la oportunidad de organizarse para que sepan equilibrar de manera responsable sus quehaceres diarios con las relaciones sociales.