Los espejos vintage son uno de esos complementos que no pasan de moda. A pesar de ese nombre clásico, lo cierto que es una pieza que está muy valorada y más, cuando hablamos de una decoración con estilo. Es por ello que hoy los vamos a rescatar de nuevo y además, de dejamos una serie de consejos para decorar con ellos.
Si bien los espejos nos acompañan en la gran mayoría de las habitaciones, en este caso no se podían quedar atrás. ¿Por qué no aprovechar ese espejo que viene de casa de nuestra abuela o nuestros padres? Siempre habrá un rincón especial en nuestro hogar que está esperando por él.
Por qué contar con los espejos vintage en decoración
Como bien sabemos, el tener un espejo en cualquier habitación es añadirle luminosidad. Hará que dichas estancias se vean un poco más grandes, aunque realmente no sea así. Además, esa luz añadida siempre es vital para darle un toque más acogedor a las habitaciones pequeñas. Por lo que como vemos, el espejo siempre es una de las opciones perfectas para decorar nuestra pared. Pero claro, si hablamos de los acabados vintage, realmente los necesitamos porque combinan con todo tipo de decoración y es más, siempre aportan un toque elegante y con estilo romántico, sin la necesidad de que toda la decoración a su alrededor tenga que ser también vintage.
El estilo de los espejos hoy
Si ya tenemos claro que queremos un espejo vintage, hay que saber que será una gran idea para combinar con diferentes acabados en tu decoración. Pero hay más, ya que siempre podemos mantener el espejo original o bien, darle un toque personal. Para ello hay que trabajar la capa externa y aplicar un spray que le otorgue el color y el acabado que buscas. Pero claro, lo más habitual es intentar dejar el estilo básico y natural del espejo. Aunque ahora ya sabemos que si está muy deteriorado siempre hay otra opción.
Cómo decorar con espejos vintage en tu hogar
La decoración con este tipo de complementos siempre se hace muy sencilla. Porque como venimos comentando, se amoldará a todas las estancias y demás ideas decorativas que tengamos en mente.
En el salón
Una de las grandes ideas es añadirlo al salón. Como tal, las paredes principales siempre serán las elegidas para este fin. Podrás colocarlo entre los muebles o también, detrás del sofá. Si tienes un espejo de pie, no dudes en usarlo también en esta estancia porque se ven, y mucho. Si tienes chimenea y un espejo pequeño o mediano, colócalo sobre ella.
En la entrada a tu hogar
Si en la entrada solo quieres tener una decoración básica, entonces puedes colocar una mesa y un espejo vintage sobre ella. Completarás este lugar con alguna planta o algún adorno básico. Intenta no recargarla para que el espejo sea el gran protagonista.
En el baño
Una gran idea para colocar en la zona del lavabo. Aunque este no tenga las pinceladas vintage, sí que podemos combinarlo y verás que el efecto resultante es más que impresionante. Si el espejo en cuestión cuenta con acabados en dorado, como suele ser habitual, intenta añadir este tono en los demás detalles del baño y conseguirás un equilibrio perfecto y con estilo.
En los dormitorios
Sobre todo, para los dormitorios de matrimonio. En ellos podrás hacer una excepción y colocar una combinación de espejos en la pared principal. Para ello no necesitas que sean demasiado grandes. Siempre es mejor un tamaño medio o pequeño. Claro que por otro lado, volviendo a los más grandes, siempre tienes la opción de colocarlo apoyando contra una pared y en el suelo. ¿Qué opción te gusta más?