Ganar espacio no es algo sencillo, porque por mucho que tengamos, siempre diremos que nos hace falta más. Por ello, hoy vamos a intentarlo y es que, los hogares reducidos necesitan verse un poco más amplios, para esa sensación de contar más metros de los que realmente hay.
Pues hay que decir que uno de los primeros pasos a dar será el de la decoración. Porque siguiendo con algunas estrategias sí que vamos a conseguir que la amplitud llegue por fin a nuestros hogares. ¿Quieres saber cómo y comenzar a aplicarlo? Entonces, ¡no te lo pierdas!
Piensa en qué es lo que realmente necesitamos
Uno de los grandes problemas con los que nos encontramos es que si nos gusta algún tipo de muebles o detalle decorativo, nos lo compramos. Claro, esto a priori no es malo pero si hay poco espacio y seguimos decorando y recargando, entonces los pocos metros que tenemos se harán aún más reducidos. Así que, debemos apostar por aquellos muebles o accesorios que realmente sean necesarios. Muebles básicos para cada habitación pero funcionales como veremos.
Los muebles funcionales, tus mejores aliados
Siempre debemos aprovechar al máximo el espacio. Por eso, debemos apostar por los muebles funcionales en todas y cada una de las habitaciones. En el salón, nada como un sofá cama. Porque nos sacará de un apuro cuando lo necesitemos. Si no tienes sitio para una mesa amplia de comedor, entonces puedes optar por un mueble estantería que se abra y sí sea una bonita mesa. Lo mismo que en la parte de la entrada, donde podremos colocar un mueble zapatero que nos sirve como soporte decorativo y al mismo tiempo, nos guarda el calzado. En los dormitorios se ahorra más espacio con camas literas o abatibles en los juveniles y con camas canapé. Ya que bajo ellas siempre podemos almacenar ropa o mantas, que son las que más ocupan.
Distribuye bien los muebles
Ya tenemos los muebles que nos van a acompañar y ahora solo queda que la distribución sea la adecuada. En ella tenemos que establecer unas prioridades. Porque como bien sabemos, siempre hay unos muebles que son más necesarios que otros, tal y como hemos comentado. Aprovecha las esquinas con los armario que se adaptan a ellas o bien, los sofás que también hacen lo propio. Intenta que haya espacios entre todos ellos y que no se vea una decoración recargada, ¿Cómo? no solo sin apilar muebles sino que ellos sean de un estilo sencillo sin demasiado acabado recargado. De ahí que la decoración nórdica siempre sea una de las grandes bases que tenemos.
Pocos y grandes, para ganar espacio
Es cierto que hay varias reglas para poder decorar con la finalidad de ganar espacio. Pero una de ellas es que optemos por los muebles un poco más grandes pero que haya menos cantidad de los mismos. Porque si optamos por los pequeños, conseguiremos llenar más los espacios con ellos. Esto se trata de un acabado de efecto visual que ya conocemos. Claro que si por el contrario, optas por muebles pequeños y pocos, también será perfecto. Aunque no siempre se da ese caso cuando tiramos por dicha opción.
Los colores tus mejores aliados
El color en los muebles y en las paredes pueden ser tus mejores aliados. Por lo que, para un entorno pequeño, nada como apostar por el blanco. Porque va a potenciar siempre la luz natural y si lo combinas con algunos espejos, tanto en muebles como en paredes, entonces será todavía más perfecto. Los acabado de madera así como el color neutro gris plata siempre es otra de las opciones. Si realmente necesitas ver más luz en tu hogar, entonces los colores claros o pastel como el azul, amarillo e incluso el naranja también te pueden acompañar pero sin recargar los espacios.