Personalmente no veo ninguna diferencia entre los amantes de los gatos y los amantes de los perros porque ambos saben lo maravillosos que son éstos animales y cualquier animal de nuestro planeta. Existen estudios que demuestran que hay muchas diferencias entre las personas que son dueñas de los gatos y los que poseen perros.
En 2014, un profesor de psicología en la Universidad de Carroll, llevó a cabo una investigación que mostraba que las personas a las que les gustan los gatos o a los que les gustan los perros, tienen diferentes personalidades. Si quieres conocer algunas diferencias entre los amantes de los gatos y de los perros, no dudes en seguir leyendo.
Si te gustan los gatos no tienes miedo a la soledad
¿Alguna vez te has preguntado que por qué tantas personas solitarias son dueñas de gatos? Esto es probablemente la respuesta a la pregunta. Las personas a las que les gustan los gatos, les encanta pasar el tiempo y vivir solos. Los amantes de los perros, en cambio, disfrutan de la compañía y suelen tener problemas a la soledad.
Si te gustan los perros, confías más en las personas
Las personas a las que les gustan los perros tienen una capacidad maravillosa de escucha y altos niveles de confianza. Tienen una tendencia a creer cualquier cosa que otros les dicen, mientras que los dueños de gatos, comprueban la información dos veces antes de decir que es correcto. Los dueños de gatos, tienen algunos problemas de confianza… pero gracias a eso, rara vez sufren engaños o traición sin al menos, habérselo ‘olido’ antes.
Los dueños de perros confían en la gente
La gente del perro tienen capacidad de escucha maravillosos y altos niveles de confianza. Tienen una tendencia a creer en cualquier cosa que otros dicen, mientras que los dueños de gatos comprobar la información dos veces antes de decir que es correcto. Los dueños de gatos tienen algunos problemas de confianza, pero rara vez sufren de engaño y traición.
Si te gustan los gatos, no te gustan las reglas
Los perros son más obedientes que los gatos, esto, todos los sabemos. Es muy complicado conseguir que un gato camine junto a ti sin ir atado o a enseñarle a tumbarse o a acostarse cuando tu quieras… los perros hacen todo esto fácilmente. Lo mismo pasa con las personas a las que les gustan los perros, siguen las reglas y obedecen cuando es necesario. Las personas a las que les gustan los gatos suelen tener tendencia a rebelarse o a ignorar las reglas que no les gustan.
Si te gustan los perros eres menos sensible
La sensibilidad es buen rasgo en las personas a las que les gustan los gatos. Esto no significa que si te gustan los perros seas una persona egoísta que no entiendes de compasión, ni mucho menos. Simplemente que te esfuerzas por pensar de forma racional y no dejas que tu corazón se preocupe por las cosas que no tienen sentido en tu vida.
¿Te gustan más los perros o los gatos?