Se dice que la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo. Es una parte que se nutre directamente de lo que nosotros le damos y que sufre cuando no nos cuidamos. Así que debemos tener en cuenta que los problemas que puedan surgir en nuestra piel tienen relación directa con nuestros cuidados. Incluso nuestro estado de ánimo puede influir en ella.
En la actualidad son muchas las personas que sufren problemas de piel recurrentes como eccemas, picores, rojeces o sequedad. Todo ello puede tener solución y venir de distintos problemas, por lo que tenemos que tener en cuenta estos detalles para cuidar la piel a diario con gestos y trucos como los que os contamos.
Beber mucha agua
Esta es una asignatura pendiente para muchas personas, ya que no solemos beber todo lo que deberíamos. Si solo bebemos cuando tenemos sed lo haremos mal ya que la sed nos indica que estamos deshidratados. Todos nuestros órganos necesitan agua para sobrevivir, por lo que es algo fundamental. Debemos beber incluso si no tenemos sed. Si te cuesta mucho beber y aumentar la cantidad de líquidos que bebes puedes hacer algunas cosas. Una de ellas es incluir alimentos con agua como la fruta en tu dieta diaria. Además, puedes hacer infusiones que tienen más sabor, pero evitando añadir azúcar. También puedes añadir rodajas de limón o de pepino en el agua, puesto que aporta algo de sabor. Así nos aseguraremos de beber más agua. Con esto notaremos en seguida cómo nuestra piel brilla más gracias a esa hidratación extra.
Alimentos con antioxidantes
Una piel joven también se mantiene con lo que comemos. Los antioxidantes combaten el envejecimiento y los radicales libres, por lo que en la alimentación debemos incluirlos. Los encontramos en alimentos como los frutos rojos, las verduras de hoja verde, las bayas de goji o en las uvas. También podemos beber té verde, ya que es un potente antioxidante que ha demostrado sus efectos a lo largo de los siglos.
Cuidado con el sol
Esto es algo que hoy en día sabe todo el mundo, pero todavía no nos cuidamos como deberíamos. Hay que comprar productos con protección solar. Aunque el sol sea necesario por su vitamina D, también nos perjudica y envejece. Así que debemos usar protector y evitar las horas principales del día en verano, ya que es un sol muy dañino por ser tan directo.
Descubre el deporte
Si piensas que el deporte solo sirve para bajar de peso te equivocas. Tiene tantos beneficios si se hace bien y con moderación que todo el mundo debería hacerlo. Si algún día decides hacer deporte seguramente notarás algo muy interesante. Tu piel tras el deporte tiene un mejor color y parece más luminosa y viva. Esto es porque los tejidos se oxigenan y mejora su aspecto y la irrigación. Así que no dudes en practicar deporte aunque tan solo sea caminar durante media hora.
Controla tu estrés
El estrés tiene muchos efectos negativos sobre nuestra salud y nuestro cuerpo. Afecta directamente a la piel frenando el proceso de regeneración y aumentando el envejecimiento. Además, hace que problemas como los eccemas o la psoriasis aparezcan de nuevo debido a esa bajada de defensas que supone el estar estresado. Así que para tener una piel bonita y radiante es necesario tener el estrés controlado.
Opta por lo natural
Los químicos que usamos en la piel se absorben y tienen sus efectos. Así que recomendamos que utilices sobre todo productos que sean de origen natural, ya que no tienen tantos efectos secundarios. Descubre marcas naturales y productos que cuidarán tu piel evitando los químicos.