La torrija es un dulce tradicional que ocupa un lugar importante en nuestra mesa en fechas tan señaladas como la Cuaresma o el Carnaval. Un postre de origen humilde que aprovecha el pan sobrante empapándolo en leche, almíbar o vino y rebozándolo en huevo para después freírlo y endulzarlo con miel o azúcar.
En Bezzia nos gusta preparar este postre a lo largo del año. No resulta difícil hacerlo; su sencillez es parte responsable de su éxito. Nos gusta especialmente esta versión de torrijas con leche condensada, en la que se utiliza este ingrediente además de leche para empapar el pan. ¿Te animas a probarlas?
Ingredientes
- Una barra de pan para torrijas
- 500 ml. de leche
- La cáscara de 1 limón
- 2 ramas de canela
- 370 g. de leche condensada
- 2 Huevos
- Aceite de oliva suave
- Azúcar
- Canela en polvo
Paso a paso
- Pon en un cazo la leche con la cáscara de limón y la canela y lleva a ebullición. Cuando hierva retira del fuego y deja infusionar la canela y el limón en la leche hasta que se temple.
- Mientras se enfría corta las rebanas de pan en oblicuo, para que las torrijas queden de la forma tradicional, y con dedo y medio de grosor.
- Coloca las rebanadas en una fuente con la profundidad necesaria para contener la leche y el tamaño necesario para que las rebanadas no se amontonen.
- Una vez templada o casi fría la leche, mezcla la leche con la leche condensada hasta lograr una mezcla homogénea.
- Vierte la mezcla en la fuente en la que has colocado las rebanadas de pan. Deja que se empapen bien y voltéalas con cuidado pasados 3 minutos.
- Pásalas por huevo batido y fríelas por tandas en aceite caliente hasta que se doren ligeramente por ambos lados.
- Ten preparado un plato con azúcar y canela al gusto para espolvorearlas segun salgan del aceite.
- Deja que se enfríen antes de servir.
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