No hay mejor forma de disfrutar un buen salmón que preparado con alguna técnica fría, cómo este tartar de salmón con base de aguacate, que además lleva un aliño delicioso. El salmón es un pescado muy saludable y rico en Omega 3, lo cual le convierte en un buen ayudante para controlar el colesterol. Es por esto que al ser cocinado de esta forma, conservaremos mejor sus propiedades beneficiosas.
Algo a tener en cuenta cuando cocinamos pescado crudo sin técnicas de calor, es que es muy recomendable tenerlo congelado previamente al menos 2 días anteriores a su preparación. Esto proceso se hace a modo preventivo, para eliminar posibles parásitos de la pieza, como los anisakis.
Ingredientes:
(Para dos personas como plato único o 4 personas como aperitivo).
- 250 – 300 gr. de salmón fresco.
- 1 aguacate.
- 1/2 cebolleta pequeña.
- El zumo de 1/2 limón.
- 2 cucharadas de salsa de soja.
- 1 cucharada de mostaza.
- 1/2 cucharadita de pasta wasabi.
- 5 cucharadas de aceite de oliva virgen.
- Sal y pimienta.
- Germinados de cebolla y huevas de salmón para decorar.
Preparación del tartar de salmón:
El salmón va a ir condimentado con una aliño, que es lo primero que vamos a preparar. Comenzamos picando la cebolleta muy menuda y la ponemos en un bol o reciente hondo. Incorporamos el vinagre, la salsa de soja, el zumo de medio limón, el wasabi, la mostaza y 3 cucharadas de aceite de oliva. Mezclamos todo esto con energía, de manera que casi quede emulsionado.
Cortamos el salmón en daditos muy pequeños y lo agregamos al recipiente junto al aliño. Mezclamos bien hasta que todos los trozos queden bien impregnados. Dejamos reposar el pescado en su condimento mientras seguimos con la receta.
Cortamos el aguacate en dos mitades, le sacamos el hueso y vamos sacando su carne con la ayuda de una cuchara. Lo cortamos en dados muy pequeños también y lo colocamos en un bol vacío. Agregamos una cucharada de aceite de oliva, sal y pimienta y mezclamos. Esta sería la forma para montarlo en dos colores, como se ve en la imagen, aunque también podemos mezclarlo todo junto al salmón directamente.
Montamos el tartar ayudándonos de un aro de emplatar o con la forma que más nos guste. En este caso se le ha dado una forma triangular. Para ello, ponemos una primera capa más delgada de aguacate como base y continuamos con otra más gruesa de salmón aliñado. Para adornar el tartar, utilizaremos germinados de cebolla y huevas de salmón, aunque también podemos optar por sésamo, alcaparras o sucedáneo de caviar.