Con la llegada de la primavera, todavía quedan algunos días frescos ideales para disfrutar de platos calientes y reconfortantes como esta sopa de garbanzos con verduras variadas. Este platillo no solo es delicioso y nutritivo, sino que también es muy versátil, permitiéndonos adaptar los ingredientes según nuestras preferencias o lo que tengamos disponible en la despensa.
Las sopas de legumbres se han convertido en un elemento básico en la cocina de muchos hogares por su fácil preparación, su valor nutritivo y su capacidad para reconfortar en días lluviosos o fríos. Hoy te mostramos cómo preparar esta sopa que hará las delicias de toda la familia.
Beneficios de la sopa de garbanzos
El uso de garbanzos como protagonista de este plato aporta un sinfín de beneficios. Los garbanzos contienen una gran cantidad de proteínas, carbohidratos complejos y fibra, ayudando a mantener un buen tránsito intestinal y una sensación de saciedad prolongada. Además, son ricos en vitaminas del grupo B, hierro y magnesio, esenciales para el buen funcionamiento del organismo.
Asimismo, las verduras utilizadas en esta receta agregan vitaminas, minerales y antioxidantes, convirtiéndola en una opción excelente para aquellos que buscan mantener una alimentación equilibrada. Es una sopa perfecta para incluir en tu menú semanal.
Ingredientes necesarios
Para preparar esta deliciosa sopa, necesitarás los siguientes ingredientes (para 2 personas):
- 200 gr. de garbanzos cocidos.
- Un puñado de guisantes frescos o congelados.
- 1 zanahoria.
- 1 patata pequeña.
- 1/4 de cebolla.
- 1 diente de ajo.
- 750 ml. de caldo de verduras o pollo.
- Aceite de oliva.
- Perejil fresco.
- Sal y pimienta al gusto.
Preparación paso a paso
1. Preparación de los ingredientes: Pela la patata y córtala en dados pequeños. Haz lo mismo con la zanahoria, cortándola en medias rodajas finas. Pela y pica finamente el ajo y la cebolla.
2. Comienza con el sofrito: En una cacerola, calienta un chorrito de aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla y el ajo, y sofríe durante unos minutos hasta que estén ligeramente dorados. Posteriormente, incorpora la zanahoria y la patata. Rehoga unos 5 minutos para potenciar sus sabores.
3. Agrega el caldo: Añade el caldo de verduras o pollo, asegurándote de que todos los ingredientes queden sumergidos. Condimenta con sal y pimienta, teniendo en cuenta que el caldo puede ya estar salado.
4. Incorporación de los garbanzos: Después de 10 minutos de cocción, agrega los garbanzos cocidos y los guisantes. Cocina durante otros 10-15 minutos o hasta que las verduras estén tiernas.
5. Toque final: Añade perejil fresco finamente picado justo antes de apagar el fuego. Rectifica de sal si es necesario y sirve la sopa bien caliente.
Variantes y consejos
- Legumbres alternativas: Si no tienes garbanzos, puedes sustituirlos por alubias, lentejas o incluso una mezcla de varias legumbres.
- Vegetales extra: Puedes añadir brócoli, espinacas, apio, judías verdes o incluso maíz para dar más variedad y textura a la sopa.
- Toque especiado: Si deseas un sabor más exótico, prueba con comino, curry, pimentón dulce o incluso una pizca de guindilla para un toque picante.
- Acompañamiento: Esta sopa combina perfectamente con un buen pan artesanal o tostado. También puedes añadir un chorrito de aceite de oliva al servir.
Este plato no solo destaca por su sencillez y sabor, sino también por su capacidad para adaptarse a diferentes estaciones y preferencias culinarias. Ya sea como una opción vegetariana o añadiendo elementos cárnicos, esta sopa siempre será una elección acertada. ¡Anímate a prepararla y disfruta de todo su sabor y bienestar!