Todos podemos sufrir un ataque de estrés y ansiedad, además de tener estrés postraumático. Queremos abordar con vosotros cuáles son los síntomas de este trastorno y cómo podemos evitar sufrirlo.
Los efectos del estrés postraumático pueden ir más allá que la huella mental o psicológica. Puede afectar también a la salud general física del cuerpo. Te contamos más a continuación.
Este trastorno mental surge por haber vivido un acontecimiento muy traumático que hace que nos afecte más de lo normal. Por ejemplo, una guerra, un accidente de tráfico, un accidente grave en el trabajo, un desastre natural, abusos físico, presenciado un homicidio, etc.
Los efectos que pueden desencadenarse en el cuerpo pueden ser graves si no se detectan ni se tratan. Por ello, tenemos que saber detectarlos a tiempo, para poder encarrilar nuestra vida lo más pronto que podamos.
Qué es el trastorno de estrés postraumático
Este trastorno de estrés postraumático se caracteriza por síntomas que se desarrollan después del evento vivido. Este tipo de estrés es temporal y se suele superar de manera natural después de días o semanas, sin embargo, dependerá de lo sucedido que la persona tarde más en recuperarse.
Por ejemplo, se suele generar una angustia constante, recuerdos, pesadillas o pensamientos recurrentes de lo ocurrido. Además, con el tiempo si no se trata, podría afectar al nivel físico de nuestro cuerpo.
Efectos del estrés postraumático
Vivir en un estado de estrés no es nada saludable, porque significa que el cuerpo se mantiene en alerta durante todo el tiempo de manera permanente. Este trastorno hace que cuerpo y mente se desequilibren provocando ese malestar general porque nuestro cuerpo no consigue relajarse.
Cuando vivimos en ese estado, se suceden algunos síntomas:
- Aumenta la frecuencia respiratoria.
- También aumenta la frecuencia respiratoria.
- Los músculos se tensionan.
- Las pupilas se dilatan.
Síntomas físicos que suceden después del estrés postraumático
Si el estrés postraumático se alarga en el tiempo podría ocasionar daños graves, por ello, queremos contarlos para que en caso de sufrir algún accidente los tengas en mente para poder prevenir esos problemas de salud en un futuro.
- Respiración alterada: se produce hiperventilación sin causa aparente, esto provoca además, mareos, desmayos, cansancio, aturdimiento o temblores.
- Mayor sudoración: existe un flujo mayor de sudor en el cuerpo, sofocos y sudores fríos.
- Cambio en el sistema cardiovascular: se estrechan los vasos sanguíneos alterando la circulación de la sangre haciendo que se aumente el riesgo de padecer algún problema cardiovascular.
- Se debilita el sistema inmune.
- Puede provocar molestias digestivas por el aumento de cortisol: como estreñimiento, diarrea, digestiones pesadas, gases, acidez, etc.
- Si hay un exceso de acidez podría provocar úlceras en el estómago.
- Cansancio y fatiga por tener insomnio y pesadillas.
- Contracturas y dolores musculares por estar durante gran parte del día tenso.
- Puede verse afectado el peso corporal.
- Problemas de líbido.
- Pérdida de cabello.
- Problemas en la piel, manchas, acné, picores o zonas más irritadas.
Relajación para recuperarse
Proponemos las técnicas de relajación para poder superar ese estado de estrés postraumático, así mejorará tu salud mental y física. Lo ideal es centrarse en una terapia donde se use la mente para conseguir un efecto positivo a nivel físico.
La clave es realizar actividades para desarrollar la concentración, por ello, opta por la meditación, la respiración profunda como por ejemplo practicando yoga o tai chi. Estas disciplinas pueden ayudar a reducir la ansiedad, depresión o la ira.
Ya conocemos cuáles son los efectos nocivos de haber sufrido una situación de estrés postraumático en el cuerpo. El tratamiento para superarlo deberá ser un tratamiento global a nivel físico y mental. Hay que trabajar el bienestar y mejorar la calidad de vida.
Aún así con todo, si te has visto en una situación donde se haya producido ese estado de estrés y ansiedad y todavía perdura, no debes dudar en acudir a un especialista para que pueda tratarte como es debido. No debemos poner en peligro nuestra salud general.