Renovar la cocina siempre nos suena a palabras mayores. Pero es cierto que tampoco tiene por qué ser así. Hoy veremos que con simples pasos podemos conseguir un nuevo ambiente sin necesidad de grandes obras y además, con un presupuesto que siempre será bastante ajustado.
Queremos darle un nuevo aire, pero dentro de nuestras necesidades. De ahí que ahora estamos más cerca de renovar la cocina pero tratando de ser prácticos y de apostar por los detalles que en ellos está la clave. Te presentamos una serie de opciones, que harán que te quieras poner manos a la obra.
Índice
Cambiar las lámparas o focos
Es uno de los primeros puntos en lo que nos debemos centrar. Quizás tengas tan solo una lámpara o un foco, por lo que sabemos que no será de lo más cara el hacernos con otro. Eso sí, hay que tener en cuenta siempre los puntos centrales de la cocina, esos donde realmente hacemos el trabajo, ya que será ahí donde podamos añadir algún punto de luz para tener una buena luminosidad. Además del tipo de lámpara, también es importante la luz que desprenda la bombilla la que suele contar con esa luz blanca que llega a todos los rincones.
Pinta los azulejos
Los azulejos de la cocina se van quedando un tanto anticuados. Sobre todo cuando hablamos de esas cocinas más antiguas. Por eso, es importante que sea otro de los pasos a tener en cuenta. No queremos hacer obras, por lo que los azulejos los dejaremos donde están, pero sí que les daremos el toque de pintura. Tienes que elegir una especial para ellos, ya que no todas las pinturas valen, sino que tendrás que hacerte con un esmalte especial.
Usa vinilos
Si por el contrario no tienes azulejos, sino pintura por las paredes, puedes optar por un cambio de color. Siempre puede ser una buena idea ya que nos creará un ambiente diferente. Pero si todavía está bastante reciente y tú quieres renovar la cocina comos sea, entonces opta por un vinilo. Como bien sabemos, los hay de todos los colores, con dibujos o frases. Podrás usar algunos pequeños o bien, uno más grande que ocupe parte de la pared. En este caso, lo dejaremos a tu gusto.
Un poco de pintura para tus muebles
En este punto, al igual que el de la pintura para los azulejos, siempre debemos informarnos bien antes. Porque quizás tus muebles no sirvan para añadirles una capa de pintura. En este caso, elegirás un esmalte para muebles que se puede usar tanto en madera maciza como aglomerados o bien sobre melamina. Suelen aplicarse sin tener que lijar, por lo que siempre es un trabajo más sencillo. Pero como bien te hemos comentado, es preferible informarte antes, no vaya a ser que causemos un destrozo. Los esmaltes los hay en una amplia gama de colores y además, con un acabado más que perfecto.
Cambiar los tiradores
Aunque parezca un paso demasiado sencillo, también es otro de los principales a la hora de renovar la cocina. Ya que podremos combinar este con el de la pintura en muebles o bien en las paredes y ya tendremos una nueva combinación muy favorecedora. Es cierto que en ocasiones los tiradores no son tan económicos como podíamos pensar. Por lo que necesitamos hacer una elección y valorar su acabado, material y como no, su precio.
Una pared magnética
Tal y como de un super-poder se tratara, también podemos crear opciones tan especiales como esta. Las paredes magnéticas son también una gran opción, a la hora de poder aprovechar ciertos rincones. Nos pueden servir para almacenar detalles como papeles, fotos o tarros pequeños y tener mejor organizada la cocina. Para ello, se puede hace con un papel o unas láminas, así como con pintura magnética, con lo que crearemos una especie de imanes en la pared.