Realizar la manicura en casa o fuera implica llevar a cabo una serie de procesos en nuestras manos. Uno de ellos tiene que ver con las cutículas. Desde hace muchos años se retiran estas cutículas para que las uñas queden mejor y se vea una bonita manicura, pero lo cierto es que en la actualidad se ha comprobado que esto puede no ser una buena idea.
Entonces nos planteamos si quitar las cutículas es algo que debemos hacer o no. Vamos a ver cuáles son los procesos que tenemos que llevar a cabo para preparar las manos para una manicura y lo que podemos hacer con estas cutículas.
Cortar las cutículas
Las cutículas se cortaban casi siempre a la hora de hacer la manicura, por lo que se convirtió en todo un hábito. Estas cutículas son una barrera natural de la piel que se vuelve más gruesa para poder proteger nuestras uñas. Sin estas cutículas la piel se dañaría y puede que se produjesen infecciones fácilmente. Es por eso que se debe tener en cuenta que estas cutículas están cumpliendo una importante función. A la hora de cortarlas puede suceder que nos hagamos una herida y sangremos. Las herramientas deben estar desinfectadas y totalmente limpias. No obstante, siempre es un riesgo que corremos, ya que se puede infectar igualmente.
Hidrata la zona
Una de las cosas que podemos hacer para que estas cutículas tengan un mejor aspecto es hidratar la zona. Existen aceites para cutículas que las ablandan y hacen que seamos capaces de minimizar su aspecto. Así podremos seguir con ellas sin que nuestras uñas parezcan descuidadas. Al hidratar la zona de las cutículas estas se ablandan y evitamos que se encuentren tan duras como siempre. Por eso antes de hacer nada con ellas tendremos que hidratarlas con esos aceites.
Exfolia las manos
Debemos exfoliar las manos para tenerlas más suaves y dentro de esto también se pueden exfoliar las cutículas para que tengan menos grosor. De esta forma pasarán desapercibidas y no tendremos que cortarlas para conseguir que nuestras uñas luzcan bonitas. Estos cuidados se deben realizar varias veces a la semana para tener las manos en las mejores condiciones. Si las cuidamos nuestra manicura será más sencilla.
Usa palo de naranjo
En las tiendas en las que podemos encontrar herramientas para hacer la manicura seguramente encontraremos unos palos de madera de naranjo, los cuales están creados para poder retirar hacia atrás estas cutículas. De esta forma podemos hacer bien la manicura sin tener que cortar las cutículas. Aunque hay mucha gente que sigue cortándolas, lo cierto es que no se debería hacer. Antes de utilizar estos palos de madera se deben hidratar y ablandar las cutículas para que sea mucho más fácil retirarlas.
Cuida las manos y los pies
Es muy importante que a la hora de cuidar las manos y los pies tengamos buenos materiales y herramientas. Siempre debemos limpiar todo lo que utilicemos, sobre todo lo que no es desechable, como las limas metálicas o los cortaúñas. Si nos hacemos una simple herida y ese material no está limpio podremos infectarla y tendremos problemas para que cure. Se deben utilizar cremas hidratantes y exfoliantes específicos para manos y pies ya que no tienen el mismo tipo de piel.
Elección de cada persona
En general no se recomienda el cortar las cutículas por los problemas posteriores que puede ocasionar en cuanto a infecciones o inflamaciones. No obstante, hay lugares en los que todavía sigue haciéndose para darle un aspecto más perfecto a nuestras uñas cuando nos hacemos la manicura. Lo ideal es ablandar estas cutículas, exfoliar y a continuación retirarlas para poder pintar las uñas.