Tenerife es una de las islas más sorprendentes del archipiélago canario y un destino de viaje muy buscado por múltiples razones. En esta isla se encuentra el imponente Pico del Teide, el pico más alto de España, además de una vasta diversidad de paisajes naturales que reflejan su origen volcánico, playas de arena negra y dorada, y encantadores pueblos que conservan la huella colonial.
Explorar Tenerife va mucho más allá de simplemente disfrutar de sus playas. Desde paisajes que quitan el aliento hasta una rica oferta cultural, gastronómica y de actividades, la isla se adapta a todo tipo de viajeros. En este artículo, vamos a conocer todo lo que puedes hacer y ver en la isla de Tenerife, destacando sus principales atractivos y secretos por descubrir. ¡Prepárate para enamorarte de este rincón único!
Acantilado de Los Gigantes
Los Acantilados de Los Gigantes son una de las formaciones naturales más impresionantes de Tenerife. Estas imponentes paredes verticales de roca volcánica llegan a alcanzar los 600 metros de altura y se sumergen unos 30 metros en el mar, creando un espectáculo visual sin igual. Los guanches, primeros habitantes de la isla, consideraban estos acantilados como el «fin del mundo».
La experiencia más popular para disfrutar de esta maravilla natural es realizar un paseo en barco. Desde el mar, se aprecian mejor las dimensiones de estas murallas naturales, y además suelen incluir actividades como avistamiento de cetáceos. Delfines y ballenas pueden verse en esta zona durante todo el año, lo que añade una experiencia inolvidable a la visita. Muchos recorridos marítimos también incluyen una parada en la Playa de Masca para un baño relajante.
Otra opción para contemplarlos es desde el Mirador de Archipenque, ubicado en la carretera general que une Tamaimo con Puerto de Santiago. Desde aquí, no solo podrás admirar los acantilados, sino también disfrutar de espectaculares vistas del pueblo que lleva su nombre, el Faro de la Punta de Teno y, en días despejados, la isla de La Gomera.
Subir al Teide
El Teide es el corazón de Tenerife y el protagonista indiscutible de cualquier visita. Este volcán, con una altura de 3.718 metros, no solo es el pico más alto de España, sino que también es un paraíso para los amantes de la naturaleza y la aventura.
Una de las formas más populares de explorar el Teide es a través del teleférico. Este transporte te lleva desde la base, situada a 2.356 metros de altitud, hasta «La Rambleta», ubicada a 3.555 metros. Desde allí, podrás disfrutar de unas vistas espectaculares y, con un permiso especial, incluso ascender a pie hasta la cima, lo que te ofrece una panorámica única del archipiélago canario y del mar de nubes que rodea el volcán.
El área que rodea al Teide forma parte del Parque Nacional del Teide, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Aquí podrás explorar paisajes que van desde formaciones de lava solidificada hasta flora endémica como el tajinaste rojo. Este parque ofrece múltiples rutas de senderismo, de diferentes niveles de dificultad, para que todos los visitantes puedan disfrutar de esta maravilla natural.
No olvides llevar ropa adecuada para la montaña, ya que la temperatura puede ser bastante baja en las cotas más altas. Si eres un amante de la astronomía, no puedes perderte la experiencia de observar las estrellas en este lugar, considerado uno de los mejores del mundo para esta actividad.
Parque Rural de Anaga
Situado en el extremo nororiental de Tenerife, el Parque Rural de Anaga es un paraíso natural que combina montañas, valles y bosques de laurisilva, una vegetación típica de climas subtropicales que parece sacada de un cuento de hadas. Este parque fue declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 2015, y es uno de los mejores lugares para disfrutar del senderismo en la isla.
Entre los senderos más destacados se encuentran el «Sendero de los Sentidos«, ideal para principiantes, y «El Bosque Encantado«, una ruta mágica que requiere reserva previa debido a su especial conservación. Durante el recorrido, te encontrarás rodeado de helechos gigantes y podrás disfrutar de impresionantes vistas al océano y a los profundos barrancos que caracterizan esta zona.
El acceso al parque se puede realizar fácilmente desde Santa Cruz de Tenerife o La Laguna, y hay numerosos miradores, como el de Cruz del Carmen y el de Pico del Inglés, donde podrás detenerte para contemplar paisajes que te dejarán sin aliento. Si prefieres explorar la costa, no te pierdas la Playa de Benijo, famosa por sus espectaculares puestas de sol.
Los miradores de Masca
El caserío de Masca, situado en el Parque Rural de Teno, es considerado uno de los pueblos más pintorescos de Tenerife. Este pequeño enclave, rodeado de montañas y barrancos, era antiguamente un refugio de piratas y hoy en día es un destino imprescindible para los amantes de la naturaleza y la tranquilidad.
La carretera que conduce a Masca es una aventura en sí misma. Con curvas cerradas y vistas de vértigo, el trayecto te recompensará con paisajes espectaculares. Una vez en el pueblo, podrás recorrer sus pequeñas calles adoquinadas, visitar su iglesia y disfrutar de una gastronomía típica en sus restaurantes locales.
Desde Masca parte una de las rutas de senderismo más conocidas de Tenerife: el Descenso del Barranco de Masca. Este sendero te lleva desde el pueblo hasta una playa aislada, atravesando paisajes impresionantes. Es una ruta exigente que dura varias horas, por lo que es recomendable estar en buena forma física y llevar el equipo adecuado.
Santa Cruz de Tenerife
La capital de Tenerife, Santa Cruz, es una ciudad vibrante que combina modernidad y tradición. Entre los lugares que no debes perderte se encuentra la Plaza de España, uno de los puntos neurálgicos de la ciudad, y el Auditorio de Tenerife, una espectacular obra arquitectónica diseñada por Santiago Calatrava.
Pasear por la Rambla, visitar el Mercado de Nuestra Señora de África y descubrir el Palmetum, un jardín botánico especializado en palmeras, son algunas de las actividades recomendadas en Santa Cruz. Además, si visitas la ciudad en febrero, podrás disfrutar del famoso Carnaval de Tenerife, considerado uno de los más importantes del mundo.
La ciudad también cuenta con playas como Las Teresitas, donde podrás relajarte después de un día de exploración. Desde Santa Cruz, es fácil acceder a otras atracciones de la isla, como el Parque Rural de Anaga o San Cristóbal de La Laguna.
Playas de Tenerife
Tenerife es famosa por sus playas de ensueño, que abarcan desde tranquilas calas de arena dorada hasta salvajes playas de arena negra. Entre las más conocidas se encuentran:
- Playa del Bollullo: Situada en La Orotava, es una playa de arena negra rodeada de acantilados.
- Playa de Benijo: Ubicada en la zona de Anaga, se encuentra entre las más salvajes y pintorescas, perfecta para quienes buscan tranquilidad.
- Playa de Las Teresitas: Una playa de arena dorada cerca de Santa Cruz, ideal para familias por sus aguas tranquilas.
- Playa del Duque: En Costa Adeje, destaca por su ambiente exclusivo y su arena dorada.
Además, Tenerife también ofrece diversas piscinas naturales, como las de El Caletón en Garachico, perfectas para un chapuzón en aguas cristalinas mientras disfrutas del entorno volcánico.
Tenerife aguarda con diversidad y experiencias inolvidables. Desde los Acantilados de Los Gigantes hasta el mágico Parque Rural de Anaga, quienes se atrevan a descubrir sus secretos encontrarán un lugar lleno de maravillas.