Cracovia, ubicada en el sur de Polonia y cercana a la frontera con la República Checa, es una joya histórica y cultural imprescindible en Europa. Con su casco antiguo declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Cracovia ofrece una mezcla de arquitectura medieval, historia reciente y una vibrante vida urbana. Este destino es perfecto para quienes buscan sumergirse en siglos de historia, disfrutar de la gastronomía polaca y maravillarse con monumentos únicos. Desde los encantos de la Plaza del Mercado hasta los conmovedores relatos del Holocausto, Cracovia es una ciudad que sabe cómo dejar huella.
Plaza del Mercado: el vibrante corazón de Cracovia
La Plaza del Mercado, conocida como Rynek Główny, es la plaza medieval más grande de Europa, con más de 40,000 metros cuadrados de extensión. Esta plaza del siglo XIII es el eje central de la ciudad y un punto de encuentro tanto para turistas como para locales. Rodeada de coloridos edificios y palacios, es el lugar ideal para disfrutar de la atmósfera única de Cracovia, repleta de cafeterías, restaurantes y mercados al aire libre.
Entre los principales puntos de interés destacan:
- La Basílica de Santa María: Esta iglesia gótica del siglo XIV es famosa por su altar de madera tallado por Veit Stoss y por el trompetista que, cada hora, interrumpe su melodía en honor a un guardia medieval que murió defendiendo la ciudad.
- La Lonja de los Paños (Sukiennice): Este mercado histórico, que en la Edad Media comerciaba con especias y tejidos, hoy alberga puestos de artesanía y souvenirs, así como una galería de arte en su planta superior.
- La Torre del Antiguo Ayuntamiento: Única parte que queda del antiguo ayuntamiento medieval, ofrece unas vistas impresionantes del casco antiguo.
- Rynek Underground: Un museo subterráneo que recorre la historia medieval de Cracovia a cuatro metros bajo la plaza.
Castillo y Catedral de Wawel: el símbolo del poder polaco
La Colina de Wawel es uno de los lugares más icónicos de Polonia. Este complejo histórico, que incluye el Castillo Real y la Catedral de Wawel, representa el corazón político y espiritual de Polonia durante siglos.
- El Castillo Real: Construido en el siglo XIV y ampliado en el Renacimiento, el castillo alberga en la actualidad un museo con exposiciones que van desde arte oriental hasta joyas de la corona.
- La Catedral de Wawel: Este majestuoso templo gótico fue el lugar de coronación de innumerables monarcas polacos. Además, alberga la famosa campana de Segismundo y las criptas donde descansan importantes figuras históricas.
- La Cueva del Dragón: Según la leyenda, aquí vivía un dragón que aterrorizaba a la ciudad. Hoy, la cueva es una atracción turística perfecta para los más pequeños.
El Barrio Judío de Kazimierz
Kazimierz es el antiguo barrio judío de Cracovia y uno de los lugares con más historia de la ciudad. Fundado en el siglo XIV, este barrio fue un epicentro cultural judío antes de la Segunda Guerra Mundial. Hoy en día, Kazimierz es un centro vibrante, lleno de galerías de arte, sinagogas históricas y una bulliciosa vida nocturna.
- Sinagogas y cementerios: Entre las más destacadas se encuentran la Sinagoga Remuh, con su cementerio histórico, y la Sinagoga Vieja, la más antigua de Polonia.
- Plaza Nowy: El corazón del barrio alberga mercados y locales que sirven la famosa zapiekanka, una especie de pizza polaca.
- Museo Judío Galicia: Este museo conmovedor cuenta la historia del Holocausto y celebra la rica cultura judía que una vez prosperó aquí.
El Antiguo Gueto en Podgórze
Cruzando el Vístula, se encuentra Podgórze, el barrio donde los nazis establecieron el gueto judío durante la ocupación. Un lugar impregnado de memoria histórica, es una visita esencial para comprender el impacto de la Segunda Guerra Mundial en Cracovia.
- La Plaza de los Héroes del Gueto: Aquí se halla el conmovedor Monumento de las Sillas Vacías, representando las vidas truncadas durante la deportación.
- La Farmacia del Águila: Un refugio clave para los residentes del gueto, hoy un museo dedicado a las historias de valentía.
- Restos del muro del gueto: Aunque en gran parte destruido, aún se pueden visitar fragmentos del muro original.
La Fábrica de Oskar Schindler
La Fábrica de Oskar Schindler, famosa gracias a la película «La Lista de Schindler», es ahora un museo que detalla la ocupación nazi en Cracovia y cómo Schindler salvó la vida de más de mil judíos. Con exposiciones interactivas, este museo es una experiencia educativa y emocionalmente impactante.
Minas de Sal de Wieliczka
A unos 14 kilómetros de Cracovia, las Minas de Sal de Wieliczka son un verdadero tesoro subterráneo. Declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, estas minas contienen capillas, estatuas y un lago salino, todo esculpido en sal.
- Capilla de Santa Kinga: Una impresionante obra maestra tallada completamente en sal.
- Propiedades Curativas: Las minas también albergan un sanatorio subterráneo que aprovecha las propiedades terapéuticas del aire rico en minerales.
Auschwitz-Birkenau
A solo 70 kilómetros de Cracovia, el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau es un lugar que no deja a nadie indiferente. Este sitio, símbolo del Holocausto, conserva barracones, cámaras de gas y objetos personales de las víctimas. Es una visita llena de solemnidad y reflexión que invita a aprender del pasado.
En cada rincón de Cracovia se respira historia, cultura y resiliencia. Esta ciudad invita a viajar en el tiempo, explorar maravillas arquitectónicas y aprender de las lecciones del pasado mientras disfrutas de su vibrante presente. Desde la Plaza del Mercado hasta los monumentos más impactantes, Cracovia no te defraudará.