No todo el mundo tiene las mismas necesidades sexuales. Quizá tu pareja necesita menos sexo que tú y eso no significa que te desee menos. Pero, ¿qué pasa si tu pareja parece que está menos interesado que tú en el sexo? Es posible que te preguntes si todavía te encuentra atractivo o, peor aún, si lo está obteniendo de otra parte. Sin embargo, lo mejor que puedes hacer, si este es el caso en tu relación, es no entrar en pánico. Estos son algunos otros pasos para lidiar con el hecho de que tu pareja quiera menos sexo que tú.
Habla de ello
Lo mejor que puedes hacer cuando parece que el impulso sexual de tu pareja ha sido casi inexistente es abrir las líneas de comunicación. En lugar de asumir lo peor, pregúntale al respecto. Si estás en una relación amorosa, vosotros dos deberíais poder hablar sobre cualquier cosa, incluida la vida sexual. No lo ataques por no querer tener relaciones sexuales, sino pregúntale con calma si está pasando algo y escúchelo de verdad.
Lo más probable es que te sorprenda lo que te diga. Podría ser que esté estresado en el trabajo o demasiado cansado por la rutina diaria. Cuando podáis hablar juntos sobre el tema, será mucho más fácil trabajar hacia un terreno común.
Utiliza los juegos previos como intimidad
Evita la presión del sexo iniciando un tipo de intimidad sexual exclusiva de juegos previos. Darse el uno al otro oralmente o incluso besarse como solías hacerlo cuando eras adolescente. La belleza de este tipo de intimidad es que cuando el sexo no es el foco principal, se vuelve más intrigante y menos esperado de lo normal. Cuando haya perdido la presión, es posible que pueda volver a hacerlo.
… O incluso otras formas de intimidad
Tratar de forzar el sexo cuando el impulso de alguien es bajo nunca funcionará, por lo que si necesitas una intimidad seria y él no, es mejor probar otras formas de hacerlo. Puedes acurrucarte junto a su lado en la cama por el simple hecho de abrazar o incluso podéis masturbaros mutuamente si eso no funciona.
Hay una gran cantidad de cosas que podéis hacer para tener intimidad juntos que no tienen nada que ver con las relaciones sexuales. Explora su cuerpo en un ambiente tranquilo y libre de sexo y podréis volver a poneros en contacto físicamente.
No te enfades
Lo peor que puedes hacer es provocar una discusión. Eso no solucionará nada e incluso podría empeorar las cosas. Tu pareja se volverá retraída e incluso puede guardar resentimiento hacia ti por hacer que se sienta así.
Tienes que llegar al fondo de por qué quiere menos sexo de una manera tranquila y racional, porque si te enfadas, nunca descubrirás realmente qué ocurre y podrías terminar arruinando la relación.
Abre la puerta a la espontaneidad
Si tú y tu novio siempre tienen relaciones sexuales los viernes por la noche después de comer comida china para llevar y ver Netflix en exceso, el sexo y la anticipación del sexo podrían volverse demasiado sencillos para que él realmente se interese. Es importante mantener viva la espontaneidad cuando se trata de su vida sexual porque él lo apreciará mucho más que una sesión sexual programada.
Si tu novio quiere menos sexo que tú, asegúrate de sorprenderlo en uno u otro con la promesa de algo que desea pero que aún no ha recibido de ti y que lo apreciará.