¿Quieres visitar Copenhague pero no tienes demasiado tiempo? Es cierto que la capital de Dinamarca bien se merece más tiempo, pero en ocasiones vamos a diferentes lugares y queremos exprimir al máximo cada uno de ellos. Por lo que sin duda, debemos concentrar las horas pero sin dejar de disfrutar de todo lo que nos merecemos.
Así que, si tan solo vas a estar durante un día en Copenhague te diremos qué es lo que puedes visitar. Porque si madrugas y te organizas bien, sí que te dará tiempo a disfrutar de uno de los lugares más increíbles. Si todavía no la has visitado, es el momento de ponerla en la lista de deseos porque seguro que te gustará y mucho.
Dar un paseo por el barrio de Cristianshavn
¿Por qué lo hemos elegido? Pues porque es una de las zonas más especiales para poder disfrutar y como tal, para recorrer de un lado a otro. Tiene cafeterías muy actuales y está rodeado de pequeñas islas que son artificiales, por lo que los canales tampoco pueden faltar. Entre ellos se dejan ver las casas flotantes que tienen colores muy variados. De ahí que te encantará disfrutar de todo ello aunque sea un poco rápido pero bien merece la pena y mucho. Puedes llegar a la iglesia barroca de San Salvador y subir hasta su torre para poder disfrutar de las vistas espectaculares.
El ayuntamiento y las calles más populares
El ayuntamiento es el punto clave y como tal, también se merece un paseo por esta zona. En la plaza te encontrarás con la fuente del dragón, así como la estatua del obispo fundador. Un lugar muy popular que también tienes que conocer y es que a partir de él te encontrarás con las calles más emblemáticas de la ciudad. La que lleva el nombre del famoso escritor Cristian Andersen, así como otra calle peatonal donde disfrutarás de las mejores compras. Lleva el nombre de Stroget y une el ayuntamiento con el Teatro Real.
El castillo de Rosenborg
Es cierto que no se puede decir que haríamos una visita como tal, más que nada porque llevamos el tiempo contado. Pero un paseo por la zona y por los jardines que rodean este palacio, bien merece la pena. Se construyó en el siglo XVII y en él hay un museo que recoge la historia de la monarquía. Sin duda, lo veas desde la perspectiva que lo veas te va a encantar y por lo tanto es otra de las zonas de obligada parada a la hora de visitar Copenhague.
El puerto marítimo Nyhavn
Tampoco podía faltar otra de las zonas emblemáticas. Porque además de ser el puerto marítimo también es una de las zonas de ocio más populares. También data del siglo XVII y siempre ha mantenido esta vital importancia para la ciudad. Tanto puedes ir a dar un paseo, como pararte en alguna de sus terrazas a disfrutar de un aperitivo para poder reponer energías y continuar con el recorrido. Si quieres hacer un mini crucero que te lleve a recorrer toda la ciudad en barco, también es una opción porque saldrán desde este punto.
El palacio de Amalienborg
Sí, es cierto que estamos rodeados de palacios, pero son una de las atracciones más demandadas. Así que, en este caso no se iba a quedar a un lado el palacio de Amalienborg. Hablamos en singular, pero hay que decir que es una zona compuesta por un total de 4 edificios que tienen estilo rococó. Cuando el palacio real sufrió un incendio, la familia se trasladó a este y se convirtió en la residencia real.
Seguro que terminarás agotado o agotada pero sin duda merecerá la pena cuando disfrutes de todo un recorrido como el mencionado. Ya que Copenhague siempre tiene un sinfín de rincones que debes visitar, al menos, una vez en la vida.