Los padres saben que son el mejor ejemplo para sus hijos, son sus guías, sus maestros… son su referente para todo. Por este motivo es importante que les establezcan normas que deban cumplir, que hayan límites en casa para que sepan qué se puede hacer y qué no. Los niños necesitan rutinas y estructura para sentirse seguros y además, necesitan también responsabilizarse de sus acciones, y eso se comienza realizando tareas.
Las tareas del hogar son responsabilidad de todos, no solo de los padres. Los padres hacen cosas por sus hijos sin cesar, y es fácil sentirse mal cuando se resisten a ayudar… Pero es una obligación enseñarles a hacer las cosas bien desde una edad temprana porque son habilidades que necesitarán en el futuro. No importa si se resisten, es importante que tus hijos colaboren en casa, porque ellos no “ayudan”, ¡hacen lo que deben hacer! Es importante hacerles ver que no te están ayudando en nada, su deber es realizar tareas en el hogar igual que lo haces tú.
Suelen mostrarse reticentes
Así como los adultos tienden a postergar las tareas desagradables, a la mayoría de los niños no les gustan las tareas domésticas y harán lo que puedan para evitar el tener que hacerlas. Si bien hay maneras de hacerlo un poco más divertido, es sabio reconocer que tu hijo no es malo por no querer hacer tareas… en realidad esta actitud es algo normal.
Si regañas o le das una sermón a tu hijo para convencerle de que debería preocuparse por ordenar el baño o barrer el patio, no es probable que recibas una respuesta alegre… ¿A quién le gusta que le riñan o le sermoneen? Es mejor que en lugar de usar el sarcasmo o las críticas, cambies el chip. Si no lo haces, tus hijos no querrán ayudar porque no se sentirán bien haciéndolo. Puedes recurrir a sobornos o amenazas, por supuesto, pero hay mejores maneras.
Consejos para que sea más fácil que tus hijos ayuden en casa
Recuerda que es importante que los hijos comiencen cuanto antes a colaborar en las tareas de casa, porque de esta manera interiorizarán sus responsabilidades y después será más sencillo para todos. Para conseguirlo no te pierdas estos consejos:
- Escribe 10 cosas que deben hacerse en tiras de papel y colócalas en un sombrero. Cuando llegue el momento de la tarea, invita a tu hijo a buscar el sombrero para saber de qué es responsable esta semana.
- Crea un poco de diversión cuando sea el momento de la tarea. Pon música a todo volumen y haz que tu hijo arregle la sala de estar durante cuatro o cinco canciones. O haz un concurso en el que le dé a todos los miembros de la familia una bolsa de papel para tirar en la basura o artículos que deban guardarse. ¡Quien tenga la bolsa más llena después de 10 minutos puede elegir el postre!
Estos son algunos ejemplos para que hacer la tarea no sea una guerra y todos colaboren en casa. ¡Porque las tareas son cosa de todos!