Todas tenemos en mente el que para nosotras, sería la pareja perfecta. Pero esta idea está a menudo nutrida de imágenes poco realistas, de clásicos estereotipos donde predomina sobre todo el aspecto físico y la sensibilidad emocional. Es algo que tenemos claro, pero a pesar de ello mantenemos una serie de expectativas sobre el hombre que nos gustaría encontrar. Una pareja con unos determinados valores acordes a los nuestros, y con unas cualidades con las que podríamos encontrar la felicidad, serían sin duda los pilares sobre los que edificar nuestras expectativas.
Tener claro lo que esperamos encontrar en nuestro compañero, es indispensable. Bien es cierto que en ocasiones no podemos controlar el enamorarnos de una persona u otra, el factor atracción tiene mucho peso. Pero a lo largo de nuestro ciclo vital y de nuestras experiencias previas, todas hemos sacado unas conclusiones sobre lo que queremos y lo que no. Lo que merecemos y lo que no merecemos. Es indispensable pensar sobre ello, al fin y al cabo se trata de encontrar a esa pareja que habrá de formar parte de nuestra vida. Esa persona con la que crecer y enriquecernos. Vale la pena pensar sobre ello.
La importancia de saber lo que queremos
Elegimos nuestra ropa, tenemos un estilo propio, sabemos qué tipo de libros nos gustan y qué directores de cine son los que realizan esas películas que nos encantan. ¿Sabes también qué tipo de pareja es la más adecuada para ti? Hay quien piensa que es mejor no marcarse expectativas y dejar «que el destino» nos una a la persona esperada. Pero esto no es lo más indicado. El éxito de una relación parte sobre todo de nuestra propia madurez como personas, en saber qué es lo que queremos, cuáles son nuestras limitaciones y cuáles nuestras necesidades. Esencial para encontrar la pareja más adecuada. Pero veámoslo más detenidamente:
- Conocerse a una misma: a la hora de buscar pareja es esencial que te conozcas a ti misma. ¿Eres una persona introvertida que no se encuentra cómoda con personas muy abiertas y expresivas? ¿No soportas que te controlen? ¿Eres una persona celosa? ¿O valoras ante todo que te ofrezcan independencia y espacio propio? Aspectos como estos son los que debes plantearte, haciendo ante todo una valoración de tus relaciones anteriores. El autoconocimiento es un modo de establecer relaciones más duraderas. Sabiendo quiénes somos y lo que queremos lograremos establecer unas expectativas más claras a la hora de buscar pareja.
- Plantéate qué buscas en la otra persona, pero dejando un espacio a la espontaneidad: está claro, no podemos controlar todos los aspectos de nuestra vida, y menos decidir de quién nos enamoramos y de quién no. Pero si tenemos claro qué tipo de valores nos definen y qué cualidades son las que más admiramos, seguramente nos determinará a la hora de fijarnos en un tipo de personas, y no en otras. Lo mismo ocurre cuando elegimos a nuestras amistades. La afinidad siempre es importante, pero tampoco hemos de obsesionarnos demasiado en la necesidad de encajar al 100%. La pareja se va construyendo día a día, y no es obligatorio que todas las piezas encajen para que la convivencia, la armonía y la satisfacción, puedan sucederse.
Cualidades básicas para buscar pareja
Cada una de nosotras tenemos un determinado tipo de deseos y aspiraciones. De necesidades. Una especie de escala de aspiraciones que a menudo suelen «desmontarse» en la realidad. Puedes soñar con un hombre de cabellos largos, sensible y atento, y enamorarte de un chico calvo, atento, y algo malhablado. Son detalles que dejamos al azar, o a lo que algunos llamarían «destino». Pero dejando estos aspectos a un lado, existen un tipo de cualidades esenciales que siempre deberíamos tener en cuenta a la hora de buscar la pareja adecuada:
- Comunicación: el poder tener a una persona con la cual expresarte, comunicarte y abrirte en todos los sentidos, es sin duda un factor esencial. Todos necesitamos ser escuchados y comprendidos. Es un modo en que las relaciones, pueden mantenerse en el tiempo afrontando cualquier conflicto o diferencia. Día a día vamos a necesitar comunicarle cosas a nuestra pareja y a la inversa, cosas que nos molestan o que necesitamos, problemas del día a día que si no son expresados en voz alta, pueden convertirse en problemas que arrastrar hasta derivar en el distanciamiento.
- Afinidad: no es necesario compartir exactamente todas las aficiones de nuestra pareja o tener las mismas pasiones. Afinidad no es solo disponer de unos mismos intereses, se trata también de saber enriquecerse el uno al otro. Compartir tiempo juntos y divertirse, conocer cosas nuevas, dejar que nos enseñe, enseñar tú a tu pareja esas cosas que te gustan, son aspectos esenciales para fortalecer nuestra relación. Para ser feliz en nuestro día a día creciendo juntos. Aprendiendo juntos.
- Compromiso: a la hora de buscar una pareja estable, es básico que te fijes en personas que no tengan miedo al compromiso. La fidelidad, los proyectos de futuro, la motivación y la fuerza emocional por mantener vuestra relación, son dimensiones esenciales para construir una relación duradera. Encontrar una persona que esté tan comprometida como tú y que te demuestre su fidelidad, son cualidades que debes valorar y tener en cuenta.
Si estás en ese momento de tu vida en que ansías encontrar una pareja con la que alcanzar la felicidad, valora todo lo que has vivido y aprendido hasta ahora. Piensa en lo que te conviene y lo que necesitas de acuerdo a todo lo experimentado. Todas sabemos cuáles son nuestras necesidades y nuestros límites, encontrar la persona adecuada es una mezcla de suerte pero también de lo que nosotras mismas estemos buscando. Cualidades como el compromiso, una buena comunicación, la fidelidad, la responsabilidad y unos valores afines a los tuyos, son dimensiones que siempre deberás tener en cuenta.