Cuando te enteras de que estás embarazada comienza una nueva época en tu vida, con mucha ilusión pero también con numerosas dudas. ¿Qué puedo comer y qué debo evitar? ¿Puedo tomar queso en el embarazo? Pues si hay que contestar a esta última pregunta, te diremos que por regla general sí que puedes consumir queso.
Claro que para prevenir ciertas complicaciones, siempre es aconsejable fijarnos bien en las etiquetas y como no, siempre habrá algunas excepciones que ahora te explicamos. Pero si tienes ganas de queso no hace falta que lo borres de tu dieta, ni mucho menos. Como sabes, solo tienes que cerciorarte de que sean seguros por ti y por tu bebé.
¿Qué queso se puede comer en el embarazo?
Siempre debemos fijarnos en las etiquetas. Porque los quesos que sí se puede consumir estando embarazada son los semi-curados o los curados que nos indiquen que la leche está pasteurizada. Por ejemplo los gouda o el emmental así como el queso cheddar o parmesano suelen estar pasteurizados lo que hace que sean totalmente seguros en el embarazo. Claro que esto es a grandes rasgos porque luego, hay más opciones de quesos, que si miramos la etiqueta, nos indican que están pasteurizados y por lo tanto sí que podremos tomarlos. Hay que decir que hoy en día con la gran mayoría, por lo que no debemos obsesionarnos demasiado con el tema.
¿Qué quesos no se pueden comer embarazada?
Los quesos hechos con leche no pasteurizada, debemos evitarlos en todo momento. Hay quesos frescos, no los envasados, que no han pasado por el proceso de pasteurización y por eso, no entrarán dentro de nuestra dieta. Tampoco lo harán los quesos azules como el Roquefort o el queso Cabrales y el Gorgonzola. Los quesos denominados como blandos del estilo de Camembert o Feta también debemos evitarlo. Claro que si alguno de ellos te lo encuentras en un plato de comida, que ha alcanzado altas temperaturas en su elaboración, entonces no ocurrirá nada y serán mucho más seguros. Pero como sucede siempre, a veces los evitamos por precaución y por quedarnos más tranquilas.
¿Puedo tomar queso en el embarazo de tipo crema?
Si te apetece una tostada con un poco de queso crema y estás embarazadas, entonces sí que podrás darte el capricho. Porque este tipo de quesos suelen estar hechos con leche pasteurizada, por lo que tanto son seguros, aunque pensemos que también entran dentro de los quesos blandos, recuerda siempre lo que tanto mencionamos: la pasteurización. De todos modos, no está de más que le eches un vistazo a la etiqueta para salir de dudas. Además, recuerda que cuando no te fíes demasiado de un producto, recurre a las marcas de siempre, porque aunque tengas que pagar un poquito más, nos dan más seguridad.
¿Qué pasa si he comido queso sin pasteurizar en el embarazo?
Si un día coincide que no nos damos cuenta, o que tenemos antojos o incluso que no sabías que estabas embarazada, no debes preocuparte en exceso. Es cierto que sí, que este tipo de productos pueden contener unas bacterias que son perjudiciales. Porque se puede desarrollar la que conocemos como la listeria. Aunque no es algo frecuente, sí que debemos tenerlo en cuenta porque al estar embarazadas podemos estar más sensible a todo tipo de infecciones y la listeria es una de ellas. Lo que a lo mejor en nosotras no es algo grave sí lo puede llegar a ser para nuestro bebé. Pero como decimos, no hace falta obsesionarse, simplemente conviene mirar bien las etiquetas y seguir disfrutando del queso que tanto te gusta.