Asturias es uno de nuestros destinos preferidos. Y es que además de tener algunos de los pueblos más bonitos de España, en Asturias puede uno disfrutar de un clima muy agradable en verano. Por eso hoy os proponemos pueblos de la costa asturiana que creemos no debéis dejar de visitar.
En esta primera parte vamos a recorrer la costa entre Gijón y la frontera con Galicia. Avilés, Cudillero y Luarca han sido los tres pueblos escogidos. Todos invitan a perderse por sus calles, a andar y desandar, para no perderse ninguno de sus rincones.
Avilés
La ciudad de Avilés es nuestra primera parada. Una ciudad que levantada en los márgenes de la ría de Avilés, a escasos 30 km de Gijón, nos ofrece uno de los cascos histórico más bonitos que podemos encontrar en Asturias. Declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1955, perderse entre sus calles es la mejor forma de descubrirlo, aunque tampoco viene mal un mapa.
Lugares que no puedes perderte en el Casco Histórico
- El barrio de Sabugo, conocido como el barrio de los marineros, una de las zonas mas pintorescas de este casco histórico.
- La plaza de los Hermanos Orbón, en la que se encuentra el Mercado de Las Aceñas construido en el siglo XIX.
- La iglesia románica del siglo XII de los Padres Franciscanos situada en la plaza Carlos Lobo, frente al Museo de Historia Urbana. En ella se encuentra la tumba de Pedro Menéndez, el adelantado de la Florida, navegante y fundador de la ciudad más antigua de Estados Unidos, San Agustín de la Florida.
- La Plaza de España o El parche y las calles aledañas: Ferrería, Cámara o Rivero
- La plaza de Domingo Álvarez Acebal, en la que se encuentran entre otras preciosas fachadas las del Palacio de Balsera y la Iglesia de San Nicolás de Bari.
- La calle Galiana, una calle de apenas 252 metros construida en el siglo XVII durante la expansión barroca de la ciudad. La calle soportalada más larga de Avilés y la única con un doble pavimento: uno empedrado para el tránsito de ganado y otro de loseta para los ciudadanos.
- El parque de Ferrera, un parque ahora público de estilo inglés que durante siglos los marqueses poseían para su disfrute en la parte trasera del Palacio de Ferrera.
Además, puede resultarte interesante visitar en la ciudad el Cementerio municipal de La Carriona, un lugar con una gran relevancia histórica y artística que forma parte de la ASCE (Association of Significant Cementeries in Europe). Y, por supuesto, el centro Niemeyer, un centro cultural diseñado por el afamado arquitecto brasileño Óscar Niemeyer y situado en mitad de la ría.
Cudillero
El pequeño pueblo marinero de Cudillero, declarado Conjunto Histórico Artístico, destaca por su organización en forma de anfiteatro y por los alegres colores de sus casas. Motivos por los por los que merece la pena acercarse y perderse entre sus calles en cuesta y callejones.
Dejarse llevar es lo ideal para descubrir tanto el pueblo como algunas de las mejores vistas de la bahía. Después, conviene recorrer además el paseo que une el puerto con el faro de Cudillero, construido en 1858 y desde el que se obtienen preciosas panorámicas.
Muy cerca de Cudillero os animo a visitar también La Quinta de Selgas, un conjunto de palacio y finca ajardinada de 900000 m2 construido entre 1880 y 1895 por iniciativa de los hermanos Ezequiel y Fortunato de Selgas Albuerne. El palacio conserva casi intacta su decoración original, y alberga pinturas de grandes maestros como Goya, El Greco, Luca Giordano, Corrado Giaquinto y Vicente Carducho. Los jardines, por su parte, alternan el estilo geométrico francés del siglo XVIII y el estilo romántico o pintoresco que se puso de moda en el Reino Unido durante el XIX.
Luarca
El Puerto de Luarca es un lugar muy fotogénico y otro de los pueblos de la costa asturiana que debes visitar. Conocida también como la Villa blanca, por ser este el color predominante en sus casas, esconde numerosos lugares que esperan ser visitados. El Palacio de La Moral, un edificio nobiliario datado de los siglos XIII, XVI y XVIII situado en la calle Olavarrieta es uno de ellos. Otro, el barrio de pescadores El Cambaral,
La ermita de Nuestra Señora la Blanca y el faro de Luarca conforman un conjunto arquitectónico de gran belleza. Situados en el extremo del promontorio de la Atalaya ofrece inmejorables vistas. Aunque si de vistas hablamos, también debiéramos mencionar las que se obtienen desde la ermita de San Roque, situada en un alto.
Otra visita obligada en Luarca es la del Bosque Jardín de la Fonte Baixa, el segundo jardín botánico con carácter privado de España. Un jardín atlántico de más de 500 hectáreas formado por paseos temáticos, estanques y plazas donde se ofrecen visitas guiadas.
¿Conoces alguno de estos pueblos de la costa asturiana?