Estamos en los primeros días del año y seguro que en esta ocasión todos nos estamos pensando lo de tener propósitos para cumplir, ya que ha sido un año muy diferente. Sin embargo, tener propósitos y motivaciones para empezar el año siempre es algo que nos ayuda a mantenernos más positivos, de ahí que sea una buena idea tratar de llevarlos a cabo y tener en cuenta cómo elegir los propósitos para que podamos cumplirlos.
A la hora de realizar nuestra lista de propósitos debemos pensar en ideas que nos resulten asequibles, sobre todo si estamos hablando de las circunstancias actuales que han cambiado nuestro modo de vida. Así que vamos a daros algunas ideas para crear una lista de propósitos de año nuevo que pueda ser llevada a cabo.
Aprender algo nuevo
Esto es algo que nos llega a motivar mucho, ya que introducir novedades en el día a día hace que todo sea más emocionante. De esta forma uno de los propósitos que más tenemos en Año Nuevo es el de aprender algo nuevo que nos guste. Puede que sea una afición que siempre hemos tenido o algo completamente diferente, pero sea lo que sea debes planificar la forma de hacerlo para que no se quede solamente en intenciones. Lo primero es buscar información sobre el tema para saber en dónde puedes aprenderlo o lo que necesitas si puedes hacerlo en casa. Así irás planificando los pasos para llevar a cabo tu plan. Aunque ahora mismo es difícil asistir a clases puedes buscar algo que puedas aprender en casa, desde hacer yoga a tocar la guitarra.
Llevar una alimentación más sana
En Año Nuevo nos proponemos bajar de peso por todo lo que hemos comido durante las Navidades y porque puede que este sea algún propósito que teníamos en mente desde hace tiempo. Lo importante no es hacer una dieta restrictiva con la que perder peso de forma rápida sino que tenemos que crear unos hábitos más sanos que nos ayuden a estar en nuestro peso ideal de forma natural y sencilla, sin pasar hambre. Lo primero que debemos hacer es buscar platos sanos y no comprar más alimentos que sean ricos en azúcares refinados, grasas o con exceso de hidratos. Retira las bebidas alcohólicas y las que tienen azúcares añadidos porque también son fatales para tu peso y tu salud y bebe agua, infusiones o zumos hechos con frutas naturales.
Proponte comenzar con el deporte
El deporte engancha y esto es totalmente cierto, pero para que esto pase tenemos que llevar un tiempo realizando deporte de forma constante, hasta que creemos un hábito. Cuando hacemos ejercicio liberamos endorfinas y nos sentimos mejor, con una mejor autoestima y más sanos, por lo que tiene muchos beneficios. Mitiga cualquier dolor que tengamos y hace que nos sintamos mejor con nosotros mismos. Es por eso que deberíamos plantearnos el ejercicio como algo que debería estar presente en nuestras vidas de forma diaria.
No se trata de hacer ejercicio sin descanso durante horas los primeros días porque esto puede llevarnos al desgaste y a no intentarlo de nuevo, sino que tenemos que comenzar por algo que nos resulte asequible y nos guste. Desde bailar a comenzar a caminar o hacer algunos ejercicios de fitness para ir acostumbrándonos. Iremos mejorando poco a poco y lo notaremos en nuestro cuerpo. Lo importante es la constancia, intentar hacer todo los días algo. Ahora que estamos más en casa una buena idea es que te compres un pequeño equipo para hacer deporte como una bicicleta estática, una esterilla, unas pesas y unas gomas que te ayudarán con tus rutinas diarias de ejercicio.