Seguro que más de una vez te has preguntado cómo es posible que no nos duela que nos corten en pelo. La respuesta es bastante sencilla si conocemos cómo funciona el mecanismo de crecimiento de nuestro cabello. Los especialistas explican que cada uno de nuestros pelos surgen como resultado de una secreción. ¿Lo sabías? Esto significa que cada uno de nuestros pelos está biológicamente muerto. ¿Cómo es que una «cosa» muerta crece entonces?, te estarás preguntando. Pues es sencillo de explicar también. La respuesta está en que las células vivas están en la base del pelo, en cada uno de nuestros folículos, y se multiplican y empujan hacia arriba la secreción antes de morir. El resultado es el que conocemos, que en la base siempre están las células vivas y el resto son todo células muertas.
Por eso, que nos corten el pelo no nos duele, pero que nos tiren de él sí nos hace daño. El cabello no tiene terminaciones nerviosas, pero la dermis dónde está la base del cabello sí que tiene y muchas. Al final, nuestro cabello no deja de ser, pues, aunque de forma muy modificada, piel.
De hecho, acabamos el post con sobre nuestro pelo con un detalle digno de la famosa serie de investigación CSI. ¿Sabías que analizando las proporciones de isótopos de oxígeno e hidrógeno de nuestro cabello y de el agua de diferentes lugares se puede saber dónde hemos estado en el último año? Parece ser que a nuestro cabello también van a parar substancias del agua que usamos, la medicación que tenemos que tomar, las drogas o sustancias tóxicas que conocimos, etc. Como ves, nuestro pelo se convierte pues, en un tipo de archivo o hoja de ruta de nuestra vida. ¡Muy útil en casos de necesidad!