La mentira puede ser el peor enemigo para una relación de pareja. Una única mentira puede causar auténticos estragos en el buen devenir de una pareja y llegar a provocar el fin de la misma. Es mucho mejor y conveniente el ser sincero con la pareja que el mentirle, ya que en la gran mayoría de los casos, las consecuencias son fatales.
El vivir con mentiras continuas es una auténtica pesadilla tanto para la pareja como para la propia persona que miente. En el siguiente artículo te contamos el por qué la mentira es el peor enemigo de una relación.
Cobardía y mentira
La cobardía y la mentira van cogidas de la mano. Por regla general el mentiroso es una persona cobarde ya que no es capaz de acatar las consecuencias que tendría el decir la verdad. El gran problema de las mentiras es que al final terminan saliendo, provocando un auténtico problema para la pareja. No se puede permitir tener una relación y mentir de manera habitual, ya que el elemento tóxico se adueña de la misma, provocando que la situación se vuelva insostenible. La mentira tiene el único objetivo de engañar a la pareja y crear una realidad paralela que no se parece en nada a la de verdad.
La baja autoestima y la mentira
El que miente a la pareja va a buscar el crear una imagen falsa para conseguir aquello que no puede si dice la verdad. Lo normal es que la persona que miente tenga una autoestima por los suelos y poca confianza en sí mismo. No es capaz de hacer frente a los problemas surgidos en la pareja y acude a la mentira para poder disfrazar la realidad. En cuanto a las razones de las mentiras pueden ser variadas: desde el temor a perder a la pareja a la frustración por no tener la capacidad económica que querría.
La mentira no debe estar permitida en una relación
Hay que dejar claro que todas las mentiras hacen daño y que no existen las conocidas como mentiras piadosas. Descubrir una mentira suele causar una gran desilusión y dolor en la pareja. Aparte de ello hay una decepción desde el punto de vista de la confianza y un gran daño a la relación en sí. Las personas que acuden de manera habitual a las mentiras, suelen ser personas bastante desconfiadas incluso de su propia pareja. Ello hace que la relación sea totalmente insostenible además de ser intolerable en todos los aspectos.
En definitiva, la mentira es un elemento que puede terminar con una relación que se pueda considerar como sólida y fuerte. Basta una sola mentira para terminar con la confianza depositada en la propia pareja. Es por ello que no se puede permitir que una persona acuda a la mentira de manera habitual dentro de una relación, ya que intenta enmascarar todo lo que puede a la realidad y y no afrontar los problemas. Recuerda que una sola mentira puede acabar con la confianza que tenga la pareja y destruir por completo una relación.