Sabroso y reconfortante, así es el plato que preparamos hoy. Las patatas con bacalao son una combinación clásica que representa lo mejor de la cocina tradicional. Este plato, además de delicioso, es fácil de preparar y resulta ideal para disfrutar en cualquier época del año, especialmente en los meses más fríos gracias a su carácter reconfortante. En esta receta aprenderemos todo lo necesario para dominar la preparación de este guiso clásico que no puede faltar en tu recetario particular.
El bacalao ha sido durante siglos uno de los pescados más consumidos en muchas partes del mundo, especialmente en países de Europa del sur como España y Portugal. Esto se debe principalmente a que, al ser salado, podía conservarse durante largos periodos de tiempo, lo que lo hacía un recurso básico en épocas de escasez. En esta receta, lo combinamos con las patatas para crear un plato que no solo es nutritivo, sino también cargado de historia y tradición.
Ingredientes necesarios para preparar patatas con bacalao
- 300 g de bacalao desalado
- 4 patatas grandes
- 3 dientes de ajo
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Un puñado de almendras (opcional)
- Harina de trigo (para enharinar el bacalao)
- 2 cucharadas de perejil fresco picado
- Aceite de oliva virgen extra
- 1 hoja de laurel
- 1 litro de caldo de pescado (o agua, en su defecto)
- Sal y pimienta al gusto (ajustar según el bacalao utilizado)
Paso a paso para preparar patatas con bacalao
- Primero, asegúrate de que el bacalao esté bien desalado. Para ello, si partimos de bacalao en salazón, es aconsejable dejarlo en remojo durante al menos 24-48 horas, cambiando el agua varias veces. Una vez listo, escúrrelo bien y sécalo con papel absorbente.
- Enharina los trozos de bacalao con harina de trigo y fríelos en una cazuela con abundante aceite de oliva virgen extra caliente. Fríe a fuego medio-alto hasta que estén dorados por ambos lados. Retira el bacalao y colócalo sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Reserva.
- Pela las patatas y cháscalas. Este método de corte, que implica romper la patata al final del corte con el cuchillo, ayuda a que suelten almidón y aporten cremosidad al caldo. Por otro lado, pica los ajos finamente.
- En la misma cazuela donde has frito el bacalao, sofríe los dientes de ajo picados a fuego medio hasta que estén ligeramente dorados. Agrega las patatas chascadas y remueve para que se impregnen del sabor del aceite.
- Añade una cucharadita de pimentón dulce. Retira momentáneamente del fuego para evitar que el pimentón se queme y quede amargo. Vuelve la cazuela al fuego y añade el caldo de pescado o agua hasta cubrir las patatas. Incorpora la hoja de laurel y una pizca de sal.
- Aumenta el fuego y lleva el contenido a ebullición. Una vez que comience a hervir, baja el fuego y deja que se cocine lentamente durante 15-20 minutos. Durante este tiempo, las patatas se ablandarán y comenzarán a espesar el caldo gracias a su almidón.
- Cuando las patatas estén casi listas, incorpora los trozos de bacalao que habías reservado. Cocina durante 5 minutos más. Este tiempo es suficiente para que el bacalao se integre sin que se deshaga en exceso.
- Antes de servir, espolvorea perejil fresco picado sobre el plato para aportar frescura y un toque de color. Puedes añadir un puñado de almendras picadas como decoración o un poco de pimienta molida si lo prefieres.
Consejos para unas patatas con bacalao perfectas
- Utiliza buen bacalao: Elige siempre bacalao de calidad, ya sea desalado o al punto de sal. El sabor del plato dependerá en gran medida de este ingrediente.
- Chascar las patatas: Este método garantiza que las patatas suelten su almidón, lo que dará más cuerpo al caldo del guiso.
- Caldo casero: Si puedes preparar un caldo de pescado casero con espinas y cabezas de pescado, el resultado será mucho más sabroso.
- No remuevas en exceso: Para evitar que las patatas se deshagan, mueve la cazuela con movimientos suaves en lugar de remover con una cuchara.
Este delicioso plato es perfecto para esas comidas familiares donde buscas un equilibrio perfecto entre tradición y buen sabor. Además, es ideal para acompañar con un buen pan casero y una copa de vino blanco. Si te animas a prepararlo, recuerda que puedes experimentar con ingredientes adicionales como pimientos o incluso huevo duro, que son opciones muy comunes en guisos similares.
Preparar esta receta de patatas con bacalao tradicional es una forma única de conectar con la cocina casera y disfrutar de un plato reconfortante lleno de matices. Atrévete a probarlo y a adaptarlo a tus gustos personales, ¡te sorprenderá!