¿Tienes alguna que otra arruga que comienza a asomarse? Entonces siempre es mejor apostar por pequeños trucos o remedios para disimularlas. Es cierto que no podemos frenar el paso del tiempo, pero sí que lo llevaremos mucho mejor con ideas en forma de productos y de trucos que te van a encantar. ¡Dirás adiós a las arrugas en un abrir y cerrar de ojos!
Aprender ciertas técnicas siempre es una manera perfecta para poder sacar el máximo partido a nuestra piel y como no, a nuestro maquillaje. Porque a veces vemos rostros bien maquillados y con una piel aterciopelada y pensamos por qué a nosotras no nos queda de igual manera. Pues hoy vas a salir de dudas y a conseguir todo lo que te propongas.
La limpieza del rostro es esencial
Cualquier piel necesita una buena rutina de limpieza. Porque aunque no estemos maquilladas, siempre puede contar con varias impurezas a lo largo del día. De manera que este paso es uno de los grandes fundamentales que no se nos pueden olvidar nunca. Apuesta por una leche limpiadora que dejará tu piel de lo más suave. Además, no se nos puede olvidar la hidratación porque gracias a ella, la piel se verá más flexible y se creará una barrera protectora en contra de la contaminación y de todos esos agentes externos que no nos hacen demasiado bien.
Base de maquillaje con acido hialurónico
Buscar la base de maquillaje idónea para nuestra piel no siempre es una tarea sencilla. Pero cuando la encontramos, nos damos cuenta de que ya no podremos estar sin ella. Así que, en este caso para intentar disimular más las arrugas, nada como una que cuente con ácido hialurónico. Además, mucho mejor si lleva también vitamina C. A la hora de aplicarla, recuerda que debes usar poco producto pero siempre difuminar bien. Recuerda que lo mejor es que sea un tono menos del color de nuestra piel, ya que las bases claras son perfectas para disimular lo que necesitamos.
El corrector mejor cremoso y líquido para las arrugas
Es cierto que los productos en barra pueden ser de lo más cómodos, pero a veces nos pueden secar más la piel. De manera que tenemos que optar por aquellos resultados más cremosos y líquidos. Ya que se encargarán de seguir hidratando la piel y no la van a cuartear. Los demás correctores pueden hacer que la piel se vea más seca y por lo tanto, las arrugas se acentuarán, que no es lo que queremos. Lo mejor es aplicarlo desde la parte del lagrimal hasta la zona central del ojo. Evitando aplicarlo en la parte de las patas de gallo. Porque cuanto más queremos disimular, a veces nos pasamos y crearemos el efecto contrario.
El iluminador en la zona de los pómulos
El iluminador es otro de los productos que no pueden faltar en nuestro día a día. Pero es cierto que en este caso, tan solo necesitas una pequeña cantidad de producto y lo iremos extendiendo poco a poco. Puede partir de la zona de los pómulos para intentar darle ese toque más luminoso y para enmarcar el maquillaje realmente. Lo que no queremos es potenciar las arrugas, de manera que por este motivo, siempre es mejor centrarnos en los productos en polvo. La zona de los labios es otra que no se queda sin las arrugas. De ahí que puedes probar a perfilar los labios con un lápiz muy claro, mejor si es transparente.
Sellar el maquillaje con polvos
Sellar el maquillaje hará que el resultado final sea de lo más especial. Por eso, debemos aplicarlos desde la parte central del rostro hacia los extremos. Recuerda que no debes arrastrar, sino que siempre es mejor aplicarlo a modo de pequeños toques. Porque de este modo, estaremos consiguiendo el efecto deseado.