
Hacer pan en casa puede parecer un desafío para muchos, pero esta receta de pan rápido sin amasado es la solución perfecta para quienes buscan resultados rápidos y sencillos. Ideal tanto para principiantes como para aquellos que quieren experimentar con recetas caseras, esta opción te permitirá disfrutar de un pan con miga densa y corteza crujiente sin complicarte demasiado.
Aunque este pan no tiene la complejidad de un pan artesanal con masa madre, es perfecto para consumir en el día acompañado de mermeladas, compotas o ingredientes salados como quesos y embutidos. Si no se va a consumir por completo, congelarlo en rebanadas es una excelente opción.
Los beneficios de hacer pan en casa sin amasado
Esta receta resulta ideal para quienes no tienen experiencia en la panadería. El proceso se centra en mezclar ingredientes básicos sin necesidad de técnicas complicadas. Además, permite personalizar el pan según tus gustos, añadiendo, por ejemplo, semillas o especias.
Otra ventaja es que no necesitas utensilios específicos, como una amasadora. Con un simple bol, una cuchara y tus manos es suficiente. Incluso, la textura final depende menos del proceso de amasado y más de seguir correctamente las proporciones e instrucciones.
Ingredientes necesarios
Para esta receta básica necesitarás:
- 250 g. harina de trigo: Puedes usar harina de fuerza si buscas un pan más aireado.
- 3 g. sal: Da sabor y controla el crecimiento de la masa.
- 5 g. levadura química: Asegúrate de no confundirla con levadura fresca o de panadería.
- 160 ml. leche: Proporciona humedad y mejora la textura de la miga.
Si prefieres una versión más saludable, prueba sustituir una parte de la harina blanca por harina integral o de espelta.
Paso a paso para preparar este pan rápido
- Precalienta el horno: Coloca papel sulfurizado sobre la bandeja del horno y caliéntalo a 210ºC.
- Mezcla los ingredientes secos: En un bol, combina harina, sal y levadura química usando una cuchara.
- Incorpora la leche: Agrega los 160 ml de leche poco a poco, mezclando hasta formar una masa.
- Trabaja la masa: Una vez que la mezcla sea difícil de manejar, viértela sobre una superficie enharinada y amasa ligeramente hasta obtener una masa homogénea, húmeda pero no pegajosa.
- Ajusta la consistencia: Si está demasiado dura, añade un poco más de leche (10 ml como máximo) y continúa mezclando.
- Da forma al pan: Forma una bola con la masa y aplástala levemente con la palma de la mano antes de colocarla en la bandeja preparada.
Finaliza y hornea
- Haz el corte: Espolvorea harina tamizada sobre la masa y realiza un corte en forma de cruz en el centro con un cuchillo afilado.
- Hornea: Cocina a 210ºC durante 30 minutos. Una vez listo, deja enfriar el pan sobre una rejilla antes de cortarlo.
Consejos y variaciones
- Congelación: Este pan es ideal para congelar. Córtalo en rebanadas y guárdalas en bolsas herméticas; así podrás descongelar solo lo que necesites.
- Ingredientes adicionales: Añade semillas de girasol, chía o linaza a la masa para obtener un pan con un toque especial de textura y sabor.
- Otras harinas: Experimenta con harinas integrales, de espelta o avena. Esto no solo cambiará el sabor, sino que también aumentará el valor nutricional del pan.
Hornear pan en casa puede ser una actividad relajante y gratificante. Aunque esta receta de pan rápido sin amasado no requiere fermentar por horas ni complicadas técnicas, es sorprendente cómo en tan poco tiempo puedes disfrutar de un pan que nada tiene que envidiar al industrial. Perfecto para cualquier momento del día, este pan hará que reconsideres la idea de comprarlo en la tienda.


