Uh, esta es una de mis mayores preguntas sin respuesta: operarme o no las lolas.
Hasta no hace mucho, el tamaño de mis lolas no eran un problema para mi, pero hoy por hoy noto que me sentiría mucho mejor con mi cuerpo si tuviera una buena delantera y poder lucir un escote orgullosamente.
Una de las primeras cosas que se hace cuando la idea se convierte en una fija y de tener el dinero necesario para la operación es la consulta con varios médicos cirujanos, meterse en foros de internet sobre el tema, consultar con una amiga que ya se haya operado, hasta poder despejar todas las dudas o miedos que tienes.
Uno de las principales causas por lo que no me animo a la operación es por el miedo a la cirugía y a la anestesia general, pero sobretodo al periodo después de la operación. Sé que son temas que tendré que despejar con la consulta de un médico idóneo… ¿que crees tu?
Para calmar mis dudas y mis miedos -y capaz que los tuyos también- a continuación te presentaré los mitos y verdades que hay detrás de los implantes mamarios. ¡Tenlos en cuenta!
- «La técnica empleada para la realización de implantes mamarios depende de cada paciente»
VERDAD: El estudio previo y la posterior consulta con el cirujano determinarán la técnica más adecuada. Se puede optar entre la vía axilar, la vía perialeolar y la vía submamaria. El implante se podrá colocar por detrás de la glándula, por encima del músculo o por detrás de este. - «Las adolescentes deberían evitar la cirugía de implante mamario»
VERDAD: En esta etapa, los senos continúan creciendo al igual que el resto del cuerpo. No obstante, si la decisión está tomada, es indispensable informarse con el profesional para saber cuales son los beneficios y los riesgos que conlleva el procedimiento. La edad adecuada está vinculada con el desarrollo completo del cuerpo y, además, con la capacidad de cada paciente de entender y aceptar en que consiste la operación. - «Es preferible colocar la prótesis por debajo del músculo»
VERDAD: La introducción submuscular separa la prótesis de la glándula, disminuye el porcentaje de contractura y, en algunos casos y pacientes, proporciona senos más naturales. Pero hay que tener en cuenta que, con el tiempo, la mama tiende a hacerse péndula y la prótesis queda en su sitio. - «Es necesario utilizar un corpiño post-operatorio»
VERDAD: Generalmente se recomienda sujetadores deportivos sin aros. No obstante, es conveniente consultarlo antes con el cirujano, quien podrá decidir el cambio de corpiño o, incluso, retirarlo. - «Esta permitido colocar un implante mamario aunque en la familia haya antecedentes de cáncer de mama»
VERDAD: No hay estudios comprobados que demuestren que hay vinculo entre la prótesis y el cáncer de mama. No obstante, es aconsejable realizar una consulta previa y los correspondientes controles después. - «Los controles obligatorios se realizan inmediatamente después de la operación»
VERDAD: Los días de control postoperatorio dependen del tratamiento quirúrgico que fue realizado y de la evolución del paciente. En general, los controles son dos veces por semana y los puntos de sutura se retiran entre los 12 y 15 días posteriores a la cirugía. Luego, es recomendable un control al mes y otro al año de la operación. - «Los implantes dificultan el amamantamiento»
MITO: Esto no es así, excepto que en la operación se seccione los conductos mamarios que desembocan en el pezón. Sin embargo, esto no tiene porque ocurrir. - «Los implantes mamarios redondos son mejores que el implante mamario en forma de gota de agua (anatómicas)»
MITO: No es así. Las dos formas de implantes son las más utilizadas y la elección entre uno y otro depende de la decisión de la paciente. Algunas mujeres eligen los implantes redondos por añaden más elevación y proporción. Mientras tanto, otras optan por la forma de gota de agua porque proporcionan un agrandamiento más natural. - «El postoperatorio siempre es doloroso»
MITO: Es distinto según como haya sido la inducción de la prótesis durante la intervención. Si el implante es subglandular las molestias deberían ser escasas. En tanto, si la prótesis es submuscular el postoperatorio puede resultar más doloroso. También dependerá de la tolerancia al dolor de cada mujer. - «Las prótesis pueden resultar perjudiciales para la salud»
MITO: Hasta el momento, no se comprobó que los implantes mamarios produzcan un riesgo para la salud. De todas formas, es fundamental el control periódico con el equipo profesional que hizo la operación para un correcto seguimiento. - «El implante mamario puede producir cáncer»
MITO: Se realizaron numerosos estudios y, a nivel científico, está demostrado que no hay relación entre el aumento del tamaño de la mamas con implantes y la aparición o desarrollo del cáncer. - «Las siliconas son definitivas»
MITO: Las prótesis deben renovarse entre los 10 y 15 años posteriores a la intervención. No obstante, en algunos casos, puede suceder que se rompan antes y, en esos casos, se hace necesario el cambio.
Fuente: EntreMujeres