Portugal es un país que ofrece muchísimo a quienes se deciden a visitarlo. Tanto su costa como su interior nos ofrece lugares increíbles, ciudades con encanto, pequeños pueblos y costas con asombrosas y bellas playas. En esta ocasión nos referimos a la zona del norte de Portugal, un lugar en el que podemos ver muchos sitios de interés. Aunque el sur de Portugal es muy turístico, el norte no tiene nada que envidiarle.
Vamos a ver los lugares más interesantes a la hora de visitar el norte de Portugal, esas zonas que no nos podemos perder. Si vamos a recorrer el norte de Portugal tenemos muchos lugares en los cuales detenernos, desde pueblos con historia a ciudades que nos ofrecen todo el encanto bohemio de Portugal.
Ciudad monumental de Braga
Fundada por los romanos y centro religioso en la Edad Media, esta ciudad de Portugal no es muy conocida, pero tiene sitios muy interesantes. Su catedral es la más antigua de Portugal y en ella se pueden ver varios estilos, desde el manuelino al gótico o barroco. Otra visita religiosa es el Santuario de Bom Jesus do Monte, con sus espectaculares escaleras. A tan solo cinco kilómetros del casco histórico, es una visita que merece la pena. En el centro histórico podemos ver el Jardín de Santa Bárbara, el Arco da Porta Nova, en donde había una antigua puerta medieval, o ver la Plaza de la República.
Ciudad medieval de Guimaraes
Esta pequeña ciudad de encanto medieval es otra de las visitas imprescindibles en el norte de Portugal. El castillo de Guimaraes del siglo X se encuentra sobre una colina y es posible subir a la Torre del Homenaje para disfrutar de las vistas. El Palacio de los Duques de Braganza es otro de sus imprescindibles, construido en el siglo XV. Por otro lado, puedes subir al Santuario da Penha en funicular, un centro de peregrinación que ofrece unas espectaculares vistas.
Viana do Castelo
Viana do Castelo está muy cerca de la frontera con Galicia. Es una pequeña ciudad que nos ofrece el increíble Santuario de Santa Luzia en una zona muy alta, con vistas asombrosas de la costa, la playa y la ciudad. Si estamos en el centro podremos coger un funicular hasta el santuario, pero también se puede subir en coche. En la ciudad podemos ver el famoso navío Gil Eames, que se usó como barco hospital durante mucho tiempo.
La fortaleza en Valença do Minho
Lo primero que nos da la bienvenida al norte de Portugal es Valença do Minho, un lugar muy visitado por su esplendorosa fortaleza y por su mercado, que tiene lugar los miércoles de cada mes. Tiene una planta formada por dos polígonos con otra zona amurallada y un foso. Esta ciudad también cuenta con una importante arquitectura religiosa con lugares como la Matriz de Santa Maria dos Anjos y la Capilla Militar del Buen Jesús.
El encanto de Oporto
Otro de los lugares que no podíamos dejar atrás es la encantadora ciudad de Oporto, un lugar que tiene un toque bohemio difícil de olvidar. Tienes visitas importantes pero también deberías caminar sin rumbo por sus calles y descubrir esas antiguas casas, algunas abandonadas, con sus fachadas de azulejos. En la ciudad tienes la ribera del Duero, una zona para pasear y para coger un pasaje para ir en los barcos que recorren el río enseñándonos la ciudad desde el agua. Por otro lado, tienes que ver puntos como la librería Lello, con sus increíble escalera, la antigua catedral conocida como la Se, con un claustro con bellos azulejos. Si te gustan estos azulejos portugueses no puedes perderte la estación de Sao Bento, ya que puedes verlos en su entrada. El Mercado do Bolhao es el lugar para comprar productos típicos y si pasas a Vilanova de Gaia podrás visitar las bodegas del famoso vino de Oporto.