Quizás tengamos esa firme idea de que cuando hablamos de un pelo fino no entra en nuestros planes hacer ningún tipo de tratamiento con aceites. Seguro porque pronto unimos el concepto de cabello fino con esa sensación y aspecto de grasa por lo que pensamos que los aceites estarán descartados para todas las mujeres que cuentan con este tipo de pelo.
Pues bien, no siempre debería de ser así. De hecho, si usamos los aceites de manera correcta, aún teniendo el pelo fino, nos aportarán más vida y luminosidad al mismo tiempo que nuestro cabello estará siendo tratado de una manera muy necesaria para él. Descubre este ingrediente básico para mantener tu pelo siempre perfecto.
¿Qué nos aporta el aceite en nuestro pelo?
Los aceites en nuestro cabello nos van a aportar la suavidad necesaria, así como el brillo y una gran vitalidad. Gracias a los componentes de los mismos, los diversos tipos de aceites se han convertido en todo un ingrediente de moda e imprescindible en nuestra belleza. Todos los tipos de cabello ya pueden beneficiarse de ellos, aunque tendrás que ir aplicándolos de la manera correcta para obtener los mejores resultados.
Además, es una manera idónea de nutrir el cabello, pero antes debemos de usar siempre un champú que se adapte a nuestras necesidades. En este caso, tienes que buscar uno que no te apelmace el pelo y que le aporte una dosis extra de volumen. En el mercado puedes encontrar numerosas marcas de champús especiales para el cabello fino. Tras el champú, ya puedes aplicar tu aceite seleccionado y verás cómo los efectos del mismo son casi inmediatos.
¿Qué aceite elegir y cómo lo uso?
Son muchos los tipos de aceite que nos podemos encontrar ya que además, gran parte de los productos que nos encontramos en belleza, tienen una base de aceite entre sus ingredientes principales. De esta manera, comprobamos que son más que necesarios una vez más.
- Aceites para el cabello: Algunos de los más usados son el aceite de almendras. Éste será perfecto para tratar las puntas ya que cuida y protege las temidas puntas abiertas. Para un efecto acondicionador, entonces puedes elegir el aceite de argán. Con el aceite de coco llegamos a hablar de la nutrición, que es parte fundamental para el cuidado de nuestro cabello. Sí es cierto que en ocasiones no contamos con ninguno de ellos y antes de tener que salir a comprarlos, siempre podemos recurrir a los remedios caseros. Es por ello que el aceite de oliva, siempre nos ayudará a restaurarlo. Con el aceite de ricino, tendrás un crecimiento más rápido y sano de tu cabello.
- Cómo usar los aceites: Después de haber elegido uno de los aceites anteriores, puedes pasar a aplicarlos. Bien es cierto que cuando hablamos de un cabello fino, lo mejor es aplicarlos desde la mitad del mismo hasta las puntas, de esta manera evitaremos la zona de la raíz que es donde se acumula más cantidad de grasa. Claro que también puedes probar a darle un masaje para activar tu cuero cabelludo con ellos, pero simplemente necesitarás un par de gotas de los mismos. Lo mejor es hacerlo cuando se tiene el cabello húmedo pero si lo que necesitas es solo un tratamiento para las puntas, entonces también lo podrás aplicar con el cabello seco.
Finalmente, tan solo tendrás que secar el cabello en su totalidad de la manera que prefieras. Sí es cierto que si te ayudas del secador, siempre vas a contar con un poco más de volumen y cuerpo. Además, no tendrás que preocuparte de los daños que pueda provocar el calor, porque ciertos aceites también son aptos para prevenir este problema ya que actúan como protectores. Seguro que ahora lucirás un pelo fino pero también más sano y con más brillo o volumen.