El acoso escolar es una lacra de esta sociedad que hay que evitar y poner fin rápidamente. El papel de la familia y la educación que recibe el niño dentro de la misma, es clave a la hora de prevenir tal acoso en la escuela. Los padres deben criar y educar a sus hijos de una manera correcta y adecuada y evitar conductas inapropiadas.
Hay una serie de valores que debe aprender cualquier niño como es el caso del respeto, la empatía o el afecto hacia los otros niños. De esta manera el niño será capaz de resolver cualquier tipo de conflicto o problema de una manera pacífica sin llegar a emplear otras herramientas inadmisibles como la violencia.
La educación en el hogar
Hay una serie de aspectos que deben estar presentes a la hora de educar a un niño y de esta manera prevenir posibles situaciones de acoso en la escuela:
- Los padres deben responder a cualquier tipo de necesidad que tengan los hijos.
- El amor y el afecto de los padres hacia los hijos deben estar siempre presente en las relaciones familiares.
- Los padres deben enseñar a los hijos a resolver los conflictos de una manera positiva y pacífica.
- Cualquier conducta o comportamiento debe tener sus consecuencias.
- El enseñar a empatizar es clave a la hora de que el niño se pueda poner en la piel de otros niños.
- Lo enseñado dentro de la familia es esencial a la hora de prevenir el posible acoso escolar, ya que los pequeños suelen extrapolar lo vivido en casa a la escuela.
La importancia del apego a la hora de prevenir el acoso escolar
La figura del apego es clave a la hora de evitar posibles casos de acoso. Si un niño se siente confiado y seguro gracias a la educación recibida en casa, rechazará sin problemas todo lo que rodea al acoso escolar. Si por el contrario, en su familia no hay nada de apego y el amor brilla por su ausencia, es probable que llegue a desarrollar ciertas conductas violentas que desemboquen en el bullying.
Hay una serie de factores de riesgo que se pueden dar dentro de la familia y que pueden favorecer el acoso escolar entre los niños:
- El apego y el afecto entre los diferentes miembros de la familia brillan por su ausencia. No hay ni amor ni cariño lo que va a favorecer el bullying en las escuelas.
- Conductas violentas dentro del hogar familiar. Si un niño ve la violencia en su casa a todas horas, es normal que en la escuela emplee la misma a la hora de resolver ciertos problemas.
- Enseñanza inadecuada en lo que respecta al respeto y cumplimiento de las normas.
- Los padres usan preferentemente métodos inadecuados en la educación de los niños. La autoridad está presente en todo momento y hay una gran falta de comunicación.
Estos factores de riesgo son bastante peligrosos ya que los niños suelen imitar lo que ven en casa. Los padres deben ser unos buenos modelos para sus hijos, por lo que deben transmitir buenos valores. La educación es clave y esencial a la hora de evitar conductas y comportamientos tan denunciables como ocurre en el caso del acoso escolar.