La depresión y la ansiedad no se dan de manera exclusiva entre los adultos. Son muchos los jóvenes los que sufren esta clase de trastornos. Se estima que casi un 20% de la población adolescente puede sufrir problemas de ansiedad y un 5% trastornos depresivos. Ante ello resulta fundamental el prevenir dichas enfermedades mentales en esta etapa de la vida y ayudar a los jóvenes para que dichos trastornos no vayan a más e incidan de manera negativa en la vida diaria.
En el siguiente artículo te contamos cómo identificar la depresión y la ansiedad en los jóvenes.
Los problemas en la etapa de la adolescencia
La llegada de la adolescencia supone importantes cambios en la vida de los jóvenes. Dichos cambios son evidentes tanto a nivel físico como a nivel social y emocional. El problema de ello es que la sociedad opta por los estereotipos frente al hecho de identificar los diferentes problemas para poder tratarlos de una manera directa.
Dichos cambios son reales e importantes, lo que puede suponer momentos de estrés y de ansiedad en la vida de los jóvenes. La sociedad tiene una imagen de la etapa de la adolescencia que provoca que un gran número de adolescentes sufran graves problemas de autoestima, de inseguridad y de ansiedad. La presión es continua y sobre diferentes temas como:
- Sacar buenas calificaciones y obtener un gran rendimiento escolar.
- Tener un aspecto físico acorde a los cánones que rige en la sociedad.
- El poder encajar adecuadamente en el ámbito social y tener numerosos amigos.
Señales de depresión y ansiedad en los adolescentes
La depresión es una enfermedad mental que afecta a la persona tanto a nivel físico como mental. Los síntomas más claros de este trastorno es el del aislamiento de tipo social, problemas a la hora de dormir, pérdida de apetito y falta de interés a la hora de realizar ciertas actividades del día a día.
En el caso de la ansiedad, la persona sufre un miedo continuo y un estado mental en alerta que le impide disfrutar de la vida. Los signos más claros que indican que una persona tiene ansiedad son los problemas a la hora de respirar, palpitaciones en el pecho, dolores de cabeza y trastornos alimentarios.
Si los padres o el entorno más cercano al joven observa alguno de los síntomas arriba descritos, es importante acudir a un buen profesional que sepa solucionar los problemas depresivos o de ansiedad. Los trastornos mentales son bastante graves y serios, de ahí que sea esencial el prevenirlos con la mayor antelación posible.
Cómo deben actuar los padres si su hijo sufre depresión o ansiedad
Antes de todo no se debe confundir el hecho de que un joven esté triste con el de que sufra depresión o ansiedad. Para que los padres sepan identificar cada problema es importante tener en cuenta los signos o señales arriba descritos. En el caso de tener cierto convencimiento sobre ello, es esencial tomar ciertas medidas preventivas que eviten que el problema se agrave mucho más.
Los expertos aconsejan sentarse con el joven y hablar de manera abierta sobre el tema. Es importante el escuchar al adolescente para poder identificar el problema y encontrar la mejor solución posible. Aparte de ello es esencial el acudir al médico para certificar que el joven tiene un problema y poder recibir el mejor asesoramiento posible.
En definitiva, cada vez son más los jóvenes los que sufren problemas relacionados con la ansiedad o la depresión. Los trastornos mentales son más serios de lo que la gente pueda llegar a pensar, por lo que es bueno el atajarlos lo más pronto posible. Hay una serie de signos o señales bastante claras que indican la existencia de tales trastornos en la vida de los jóvenes. Recuerda que la labor de los padres es esencial sobre todo a la hora de prevenir dichos problemas y que no hagan más daño en la vida diaria del adolescente.