Las afecciones causadas en el estómago y en los intestinos son cada vez más frecuentes y habituales entre los niños y los adolescentes. Los datos señalan que cada año son más los pequeños los que sufren este tipo de dolencias, destacando entre ellas la enfermedad de Crohn.
Este tipo de afección que afecta al aparato digestivo, consiste en una fuerte inflamación en la parte final del intestino delgado y el principio del grueso. En el siguiente artículo te mostramos cómo afecta este tipo de enfermedad a la población infantil y joven y qué deben hacer los padres ante ello.
Causas de la enfermedad de Crohn en los niños
A día de hoy no se conoce una causa concreta por la que un niño puede llegar a sufrir tal dolencia intestinal. Existen diversos factores como la alimentación o hábitos en la higiene que pueden provocar que los pequeños desarrollen tal enfermedad, a causa de una bajada en sus defensas. También puede deberse a una causa genética y los antecedentes familiares del pequeño.
Cómo se manifiesta la enfermedad de Crohn
Son varios los síntomas que pueden hacer indicar que un niño padece la enfermedad de Crohn:
- La diarrea es uno de los síntomas más habituales de este tipo de afección. Si dicha diarrea va acompañada de sangre, es muy posible que haya inflamación en la zona del colon. Si la cantidad de diarrea es bastante importante lo normal es que la inflamación se produzca en el intestino delgado.
- Otro de los síntomas más claros de esta enfermedad son los dolores en toda la zona abdominal.
- Estado febril alto.
- Falta de apetito que va acompañada de una perdida de peso importante.
- Falta de energía y cansancio a todas horas del día.
- Aparición de úlceras y fístulas.
- Problemas en la articulaciones pudiendo llegar a causar artritis.
Qué pueden hacer los padres ante la enfermedad de Crohn
Por desgracia se trata de un tipo de afección crónica y que no tiene cura. El niño deberá vivir toda su vida con las dolencias intestinales. Habrá épocas en la que los síntomas se agudizarán frente a otras épocas en la que los síntomas sean mucho más leves. El tratamiento que se siga debe tener el objetivo de rebajar los síntomas y que ayude al niño o al joven a llevar una vida lo más normal posible. Un cambio en los hábitos a la hora de comer o la ingesta de determinados medicamentos pueden ayudar a controlar la enfermedad de Crohn.
En definitiva, la enfermedad de Crohn es más común en los adolescencia que en la niñez, aunque los datos señalan que cada vez son más los niños los que sufren tal dolencia. En cuanto a los síntomas son los mismos en los adultos que en los pequeños. Si dicha afección se sufre durante la pubertad, es muy posible que la enfermedad termine repercutiendo de manera negativa en el desarrollo normal del joven. Los expertos señalan la importancia que tiene el inculcar a los niños desde que son pequeños, unos buenos hábitos alimentarios para evitar que puedan llegar a desarrollar tal afección intestinal.