¿Cuántas dietas milagros habremos escuchado y leído ya por parte de médicos y nutricionistas que dicen ser buenas para perder esos kilitos que nos sobran? ¿Muchas, verdad? Pues bien, hoy os traemos otra diferente. No sabemos de su efectividad pero sí podemos decir que es defendida por un doctor entendido en el tema.
Se trata de la dieta perfecta según tu grupo sanguíneo. No es una dieta pensada para perder peso como tal sino una especie de guía para que cada persona coma lo ideal para su organismo siguiendo lo que se cree que debemos comer por genética y basándose sobre todo en evitar el estrés. Tanto si sólo es curiosidad lo que sientes por esta dieta, como si quieres saber más a fondo de qué trata para llevarla a la práctica, sigue leyendo un poco más abajo lo que hablamos de ella.
Índice
Dietas para cada grupo sanguíneo
El Doctor Peter J. D’Adamos muestra en su guía las fortalezas y debilidades que posee seguir una dieta acorde con tu grupo sanguíneo. A continuación, os desvelamos los detalles de cada una de ellas para cada uno de los distintos grupos sanguíneos.
Dieta para el grupo sanguíneo A
Según la guía creada por el Dr. Peter, las personas que pertenecen a este grupo sanguíneo poseen una vida estructurada y ordenada. Aquellos que son de este grupo, se esfuerzan por conseguir un estado de paz mental e intentan relacionarse con personas positivas y tranquilas. Sin embargo, en ocasiones, pueden estresarse con facilidad, lo que puede desencadenar en ciertos desequilibrios hormonales.
Por todo esto, los de este grupo, se verán beneficiados al seguir una dieta pura y simple, acompañada de ejercicio suave. Esta dieta estará cargada tanto de verduras como frutas, ya que les vendrá perfectamente y les ayudará a disminuir los factores de riesgo naturales de la salud como la diabetes o los problemas cardiovasculares.
Según este doctor, aunque la carne no es dañina para ellos, estaría bien que poco a poco fuesen sustituyendo la proteína de la misma por las proteínas de vegetales.
Dieta para el grupo sanguíneo B
Según el doctor, las personas del Grupo B son muy adaptables a cualquier situación y pueden convivir bajo condiciones constantemente cambiantes. Normalmente suelen ser los menos obstinados y tercos de su entorno, ya que casi siempre se muestran abiertos de mente y son capaces de ver tanto la cara buena como la mala de una misma realidad.
Las personas pertenecientes a este grupo producen niveles más altos de cortisol cuando están estresados, y son un poco más propensos a padecer enfermedades autoinmunes. En cambio, cuando se deciden a practicar un estilo de vida saludable, casi siempre acaban teniendo menos factores de riesgo que el resto de tipos de sangre llegando a tener una mejor condición física y mental.
La guía dice que los de este grupo a pesar de ser bastante sibaritas a la hora de comer, deberían evitar la ingesta de maíz, avellanas y trigo, sobre todo para evitar la retención de líquidos o la fatiga. También se recomienda cambiar la carne de pollo por otras como las del cordero, porque el pollo contiene un aglutinador en su tejido que puede causar problemas en el torrente sanguíneo. Por último, se especifica el aumento de la ingesta de verduras, huevos y productos lácteos bajos en grasa en su dieta.
Dieta para el grupo O
Por un lado, los del Grupo O tienen la mejor capacidad de digerir la proteína, la grasa y el calcio, ya que tienden a tener una mayor cantidad de productos químicos y enzimas digestivas que ayudan a su absorción. El lado menos bueno es que son más propensos a sufrir algunas enfermedades o trastornos como úlceras o tiroides.
Se les recomienda una dieta alta en proteínas de carnes magras, aves, pescado, verduras y frutas. Sin embargo, no deben abusar del trigo, los productos lácteos o legumbres, así como la cafeína y el alcohol para no aumentar sus niveles de adrenalina.
Dieta para el grupo AB
Las personas del Grupo AB tienen un grupo sanguíneo muy raro, ya que se encuentran por debajo del 5% de toda la población, de hecho, hasta hace unos 10 siglos no existía nadie con este grupo sanguíneo.
La dieta que se recomienda para ellos es una mezcla de la dieta especificada para los del grupo A y aquella recomendada para los del grupo B. Se les recomienda por encima de todo, realizar comidas frecuentes y pequeñas a lo largo del día con el fin de metabolizar los alimentos de manera más eficiente.
Y tú, ¿qué grupo sanguíneo tienes? ¿Confías mucho en este tipo de dieta? ¿Qué te ha parecido?
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