Quizás no te parezca tan extraño el hablar del té azul. Más que nada porque seguro que conoces el verde, el rojo o bien el negro y demás variedades. Aunque es cierto que nuestro protagonista de hoy no es tan visto como los mencionado. Algo que debemos cambiar porque cuando sepas todos los beneficios que acarrea seguro que lo querrás en tu vida con los ojos cerrados.
Proviene del sur de Asia y allí no es algo tan ‘novedoso’ porque tiene tras de sí muchos años de historia. Surge a raíz de una planta que se le conoce como ‘el guisante de mariposa’ y que tiene un color azul muy espectacular. Así que, partiendo de ello, vamos a ver cuáles son todos los beneficios que un té de este tipo nos aporta a nuestra salud.
¿Qué es el té azul y para qué sirve?
Hay que decir que se le conoce también como el té Oolong. Esta combinación de hierbas no solo se ha usado como té, sino que gracias a su color también es habitual verlo en cosméticos o incluso en tejido para teñirlos. Pero en este caso hablamos de él de cara a nuestra salud y se ha convertido en uno de los grandes protagonistas. Tiene la ventaja de que puede cambiar de color de una manera asombrosa. Es más, pasará a un color morado si le añades algunas gotas de zumo de limón. ¿Cuáles son las grandes ventajas y beneficios de este tipo de té?
- Hay que decir que no contiene cafeína, ni grasas ni tampoco colesterol.
- Si tienes problemas de digestión, puedes tomártelo después de las comidas y notarás la mejoría rápidamente.
- Es una opción idónea para liberar las toxinas del cuerpo.
- Lleva un alto contenido en vitaminas.
- Es relajante y un alivio de cara a los síntomas de nerviosismo o ansiedad.
- Te aporta más energía y dejará el cansancio de lado.
- Te ayuda contra la pérdida de peso.
- Mejora la memoria.
- Si tienes un poco de fiebre, antes de tomarte una pastilla, prueba con este té.
- Reduce el colesterol y protege tu corazón.
- Fortalece el cabello pero también mejora la piel.
Cómo se produce
Las hojas para poder elaborar este té llevan un proceso de oxidación, que es el que consigue ese color tan característico. Pero no solo el color sino que de este modo, a través de dicho proceso, también consigue tener las cualidades que antes mencionamos. Tanto la exposición al sol como la ventilación de las hojas se produce en un tiempo corto para estar listo. Todo lo contrario que para la elaboración del té negro que sí lleva más tiempo. Entonces podemos decir que hay una oxidación pero parcial porque se quiere aprovechar al máximo más de sus ventajas.
Cómo tomar el té azul
Seguro que a estas alturas ya estás un poco más interesada en poder hacerte con él y probarlo. Como ocurre con el resto de tés o de infusiones, lo cierto es que tampoco debemos pasarnos. Es cierto que apetecen, sobre todo cuando las temperaturas bajan, pero aún así debemos tomar un par de tazas al día y con ello será más que suficiente, para poder obtener los beneficios que antes mencionamos. Además se aconseja tomarlo entre comidas y no justo después de ellas, por si interfiere en la absorción de hierro. Puedes esperar un poco que se asiente la comida y disfrutar de una sobremesa con un bonito color azul. Para ello tanto solo tienes que hervir agua, echar las hojas y esperar unos 4 minutos. Lo cuelas y ya podrás saborear tu nuevo té. Porque seguro que el té azul se convertirá en tu mejor aliado.