A lo largo de nuestra vida nos vamos dando cuenta de que ser felices es una cuestión de actitud y de proponérnoslo cada día. Es evidente que hay cosas que no podemos controlar, pero más allá de eso nosotros mismos podemos elegir ser felices y seguir adelante con una sonrisa, disfrutando de aquello que nos ha dado la vida.
Hay algunos hábitos en los que caemos casi sin darnos cuenta y que pueden llegar a hacernos tremendamente infelices. Es un problema seguir con ellos y no llegar a identificarlos, puesto que pueden hacernos daño psicológicamente y ser una gran carga a la larga. Por eso debemos aprender a reconocerlos.
Quejarnos sin tratar de cambiar las cosas
Una de las peores cosas que podemos hacer es quejarnos constantemente pero sin tratar de cambiar las cosas. Nos hace muy infelices estar hablando de una situación que no nos gusta y de la cual nos quejamos pero que aceptamos porque realmente no nos planteamos enfrentarnos a ella y cambiarla. Los cambios dan mucho miedo y no todo el mundo está preparado para afrontarlos, pero no cambiar las cosas que nos hacen infelices o al menos no tratar de intentarlo puede ser incluso peor. Mantenernos en una situación que aleja la felicidad de nosotros es algo realmente nocivo que apaga nuestro ánimo y voluntad. Por ello debemos armarnos de valor y afrontar que cualquier cambio es mejor que no hacer nada.
Hacer cosas que no nos gustan
Es cierto que todos tenemos que llevar a cabo tareas que nos pueden gustar más o menos. Pero es importante que no nos pasemos el día haciendo algo que realmente no nos gusta. Hay que trabajar para sobrevivir, pero siempre podemos mejorar y encontrar un trabajo que nos guste, algo que nos apasione y en lo que invertir nuestro tiempo. Es común en las personas infelices pasarse el día haciendo cosas que no les gustan, para terminar el día sin ganas de que llegue el siguiente. Rompe con eso y céntrate en todo aquello que te gusta.
Vivir del pasado o del futuro
Aferrarse al pasado o bien pensar constantemente en un futuro incierto que todavía no es real pueden ser dos cosas que nos hagan infelices. Sobre todo por el hecho de que nos mantienen alejados del presente, el que estamos viviendo y nos brinda todas las oportunidades. Así que toma nota de eso y abre los ojos a tu presente.
Ser pesimista ante la vida
El pesimista siempre va a ver el vaso medio vacío. Ser pesimista es una cuestión de actitud. Ante una situación hemos visto a personas que lo afrontan de manera positiva y otros de forma negativa. Sea cual sea el resultado, los positivos tienen más posibilidades de conseguir lo que quieren porque creen en ello y además afrontan la derrota como una enseñanza. Es por eso que debemos aprender a ser mucho más positivos.
Buscar la aprobación de los demás
Otra de las cosas que debemos evitar en esta vida es buscar siempre la aprobación y el permiso de los demás. Es una actitud que solamente nos va a traer disgustos, puesto que ellos no van a vivir nuestra vida ni a asumir las consecuencias de nuestras decisiones. Hoy en día es habitual que con las redes sociales tratemos de vivir hacia los demás, mostrando lo que pensamos que desean ver. Pero esta actitud nos aleja de quien realmente somos y nos llena de incertidumbre y de pesar por no aceptar realmente quiénes somos.
Verse como víctimas de los sucesos
Las personas infelices siempre piensan que todo lo que les pasa es algo que no pueden controlar. Siempre es culpa de los demás o del universo. Con esta idea pensaremos que no tenemos ningún poder sobre nuestra felicidad o nuestro destino, lo que nos hará más infelices. No debemos sentirnos como víctimas o nos convertiremos en este tipo de persona.