Flexiones diamante: ¿Cómo hacerlas correctamente?

Flexiones diamante

¿Integras en tus entrenamientos las conocidas como flexiones diamante? Sí, es una de las variantes más especiales de las flexiones clásicas. Decimos ‘especiales’ porque debes hacerlas de manera correcta para que así, puedas beneficiarte más y mejor de ellas. Son varias las partes del cuerpo que involucra y eso nos encanta.

Sabemos que con las flexiones diamante estaremos haciendo una versión mejorada de nuestro entrenamiento. Pero antes de lanzarnos a por ellas, siempre debemos tener en cuenta una serie de consejos o ideas previas. Así que, no vamos a perder más tiempo y comenzaremos a disfrutar de un ejercicio como este. ¿Estás preparada o preparado?

¿Qué son las flexiones diamante?

Cuando mencionamos las flexiones, tenemos claro qué son. Pues en este caso, ya hemos avanzado que se trata de una técnica similar pero en forma variante. Porque podemos decir que es un ejercicio que se realiza con el peso corporal. Así que, partiremos de las flexiones más comunes pero cambiando la posición de las manos. Ahí, justamente, está la diferencia. Las manos se apoyan en el suelo, abriendo ligeramente los dedos y juntando tanto los índices como los pulgares. De manera que con ellos parece la forma de un rombo o diamante.

A parte de esto, aunque creas que el resto es exactamente igual no te equivocas del todo. Porque la ejecución sí que es similar a las flexiones que conocemos, pero esta posición de las manos que hemos mencionado hace que la distribución del peso cambie, por lo que un ejercicio como este activará los músculos que son más pequeños. Así que, podemos decir que más completo y un perfecto complemento a las flexiones básicas.

¿Qué se trabaja con las flexiones diamante?

Con ese cambio de las manos, nos preguntamos qué es lo que se trabaja con unas flexiones como estas. Parece que el gran beneficiado es el tríceps, ya que este se ejercitará mucho más que en las convencionales. Pero no solo él, porque los brazos juegan un papel primordial, aunque el pecho sí que se queda en un segundo lugar. El core y el deltoides también comenzarán a activarse, de ahí que hablamos de un ejercicio que es bastante completo para nuestro cuerpo. Así que, para hacer un buen trabajo siempre debes centrarte en la postura y a partir de ella, ya podrás sacarle el máximo partido. Recuerda que las repeticiones son siempre importantes para poder ver mejores resultados.

Flexiones rombo

Cómo se hace la flexión rombo

Seguimos hablando de la flexión diamante o rombo, ya que es la misma con palabras sinónimas. En primer lugar, apoyamos las manos tal y como antes mencionamos. Es decir, juntando los dedos índices y pulgares. Los brazos quedan extendidos y a la altura de los hombros para poder echar el cuerpo hacia atrás. Recuerda que el cuerpo siempre debe mantenerse en línea recta y será ahí cuando bajemos flexionando los codos. Se puede bajar hasta casi tocar las manos pero si tienes dolor en los brazos o en los hombros, la flexión será más corta y segura. Por lo que los apoyos que tienes son las manos pero también los dedos de los pies.

Beneficios de la flexión diamante

Ya por último, pero no menos importante, tenemos los beneficios de este tipo de flexiones. Por un lado hay que mencionar que nos ayudará a fortalecer tanto los brazos como las manos, aunque en un comienzo puede que no lo veas tan claro. Gracias a ellas también gastarás más calorías, aunque no solo por la flexión en sí sino también por las repeticiones y el resto del tipo de entrenamiento que completes. Tu tejido óseo también se va a beneficiar de una opción como esta. Así que, es el momento de no dejarlas escapar.


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