¿Quieres apostar por unos exfoliantes caseros faciales? Sabemos que es uno de esos pasos que nuestra piel necesita. Porque solo de este modo, la podrás liberar de las células muertas y demás impurezas que se van acumulando. Además de que, la notarás mucho más suave que de costumbre.
La exfoliación entra siempre dentro de la rutina de belleza que se precie. Por ello, en este caso, vamos a elaborar una serie de exfoliantes caseros y muy sencillos de llevar a cabo. Para que de este modo, puedas usarlas cuando quieras y en pocos minutos. ¿Comenzamos?
Hidratación y limpieza con azúcar y aceite
Es cierto que a veces podemos usar la crema hidratante que nos guste, pero tampoco podemos olvidarnos del aceite de oliva. Como sabrás, es uno de los grandes ingredientes para la belleza. Porque aporta muchas ventajas, entre las que destacamos la gran hidratación. Por lo que nuestra piel quedará más que suave de una sola pasada. Por ello, nada como mezclar dos cucharadas de aceite con otras dos de azúcar. Una mezcla perfecta para que luego la podamos ir aplicándolo en forma de movimientos circulares. No tengas prisa y dejar que repose unos minutos, para luego retirar con agua.
Apuesta por la clara de huevo
Es otro de esos ingredientes con los que podemos limpiar nuestro rostro, en un abrir y cerrar de ojos. Lo cierto es que en este caso solo apostamos por la clara del huevo. Para ello vas a batir bien dos claras. Mientras, lava el rostro con agua caliente, aunque no demasiado, pero sí lo suficiente para poder abrir los poros. Una vez hecho esto y dejado secar, llegaremos al momento de aplicar una capa de clara de huevo y pondrás sobre ella una capa de pañuelo de papel o bien, dos de papel higiénico. Tenemos que esperar a que se seque la clara y luego, retiraremos todo por completo. Con esta acción, eliminaremos toda la suciedad y esos puntos negros que se dejan ver en ocasiones.
Crema hidratante y café molido
No podía faltar el café como otro de los exfoliantes caseros faciales. Pero no solo para las piernas o brazos y decir adiós a la celulitis, sino que también es perfecto para el rostro. Para devolverle la suavidad y con ello, la tersura que se merece. Por lo que en este caso, nada como apostar por el café molido y la crema hidratante que sea de la que uses a menudo. Tan solo con esta mezcla podrás realizar un tratamiento más que perfecto para tu piel. Recuerda que puedes repetirlo una vez por semana y notarás antes todos los grandes resultados.
Combina el yogur natural con las fresas
Sabemos que las frutas siempre son las que nos aportan las vitaminas necesarias para nuestra piel. Algo que también se complementa a la hora de combinar con el yogur. Otro de los grandes aliados para una piel más suave. Por eso, debemos triturar unas seis fresas y mezclarlas con dos cucharadas de yogur natural. Ahora solo queda ir aplicándolo por las zonas más conflictivas como son la parte de la frente o barbilla.
Avena y agua
Si prefieres sustituir el agua por leche, pues todavía mejor, ya que la leche suaviza y además la protegerá. Sea como fuere, vas a combinar dos cucharadas de avena en copos con tres de agua o leche. Tienes que conseguir una pasta, por lo que podrás combinar mejor los ingredientes como consideres. Luego, debes ir aplicándolo en el rostro limpio y realizando un ligero masaje. Luego, tan solo debemos limpiar el rostro y listo. ¡Así de sencillo! ¿Por cuál de todos ellos vas a comenzar?