Hacer deporte es sano, en eso podemos estar todos de acuerdo. Pero no siempre lo acaba siendo porque o no lo hacemos bien o lo hacemos en exceso y por encima de nuestras capacidades. Por eso a la hora de hacer deporte también es necesario utilizar el sentido común para evitar daños mayores y que esta práctica no traiga malas consecuencias.
Es necesario evitar los daños cuando hagamos deporte, por lo que vamos a daros una serie de consejos. Sobre todo es importante seguir unas pautas si somos principiantes, porque es fácil lesionarse y acabar por no hacer ningún deporte en largo tiempo.
Metas realistas
Lo primero que debemos hacer es plantearnos unas metas que sean realistas. No es posible ponerse en forma en una semana ni en un mes. Se trata de cambiar nuestros hábitos y el estilo de vida para adaptarlo a un tipo de vida más sano, lo cual lleva tiempo y es progresivo. Solo así conseguiremos verdaderos resultados y evitaremos auténticos problemas de salud. Forzar a nuestro cuerpo más allá de los límites solamente es perjudicial. Por eso deberíamos crear un calendario de metas para ir logrando realizar determinados ejercicios, correr determinada distancia o tiempo o aquellas metas que nos hemos propuesto.
Opta por los deportes sin impacto
Si tienes sobrepeso, el impacto es perjudicial para tus articulaciones, las cuales pueden sufrir con cada golpe. Es por eso que en este sentido no se recomiendan deportes como correr, el cual crea impacto en tobillos y rodillas. Si comenzamos con esto deberíamos realizar deportes como bicicleta indoor o bien natación, siendo este último uno de los deportes más recomendados. Nos ayuda a reforzar toda la musculatura del cuerpo, aporta flexibilidad, coordinación y al mismo tiempo no cuenta con impacto en las articulaciones. Por eso se recomienda para todo tipo de personas.
Cuidado con los pesos
Si vamos a comenzar realizando fitness es importante tener en cuenta cuánto peso podemos levantar y contar con la ayuda de expertos en el tema. Fortalecer los músculos se puede hacer incluso desde casa, pero siempre debemos utilizar un peso que nos permita realizar repeticiones. No debe ser muy ligero, pero tampoco muy pesado. Con el tiempo veremos cómo soportamos más repeticiones y solo entonces podremos subir de peso.
Beber líquidos y alimentarse bien
A la hora de conseguir que ese deporte mejore nuestra calidad de vida, también debemos incidir en nuestros hábitos alimenticios. Es necesario hidratarse, pues se pierden líquidos con el deporte, por lo que debemos tener cerca agua o infusiones sin azúcar. Pero también hay que alimentarse bien, puesto que el músculo se alimenta para crecer. Las proteínas magras son imprescindibles, pero no debemos olvidar las vitaminas y los carbohidratos para tener energía. A la hora de realizar una dieta equilibrada siempre es mejor consultar con algún especialista en el tema que nos ayude a enfocar esa alimentación según nuestras capacidades y nuestra salud.
Ejercicio moderado
Es cierto que hay quien comienza con mucha energía, pero comenzar dando demasiado puede hacer que pronto nos cansemos. Es mejor comenzar con ejercicio moderado, uno de cada dos días de la semana. Así podremos adaptarnos bien a una rutina. Pasado más de un mes veremos cómo el ejercicio nos engancha, por lo que podremos aumentar esos días si así lo deseamos. Es una forma de conseguir no dejar las cosas porque nos sobrepasan, algo que es habitual si no tenemos la costumbre de hacer deporte. Además, si hacemos demasiado ejercicio corremos también el riesgo de lesionarnos o de tener tantas agujetas que nos saltaremos las próximas sesiones. Así que siempre es mejor comenzar poco a poco para recorrer ese largo camino.